LA DIVISIÓN EN LAS FILAS SOCIALISTAS

Sánchez toma el control del PSOE de Madrid antes de las generales

IOLANDA MÀRMOL / JUAN RUIZ SIERRA MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Nuevo golpe de efecto de Pedro Sánchez para tomar el control de la siempre ecléctica federación madrileña. La dirección regional del partido, recién salida de un extemporáneo cónclave, decidió este lunes destituir al portavoz en el Ayuntamiento de Madrid, Antonio Miguel Carmona, y elevar en su lugar a la número dos del PSM -recién rebautizado como PSOE-M- en el consistorio, Purificación Causapié. Fue la nueva secretaria de los socialistas madrileños, Sara Hernández, la que confirmó a Carmona la decisión. Le ofreció, a cambio, ocupar un escaño en el Senado, proposición que Carmona rechazó de plano y que deja por cierto en entredicho las críticas al PP por convertir la Cámara alta en un retiro dorado de altos cargos.

Tras conocer la intención de Hernández, compareció Carmona para explicar que, a su juicio, la iniciativa de cesarle se debe a la profunda división de los socialistas madrileños y a la pugna entre facciones por controlar el partido. "El cese es obra y gracia de la dirección federal", aduce el portavoz, para quien la cúpula del PSOE busca imponer un equipo que no discrepe. También considera que ha pesado su apoyo al exsecretario general del PSM, Tomás Gómez, cuando fue destituido por Pedro Sánchez, el pasado febrero.

EL AFECTADO RESPONDERÁ

Tras el cese de Gómez, la gestora del partido podría haber operado hasta final de año. Sin embargo, se convocó por sorpresa un congreso regional la semana pasada, en plenas vacaciones, en el que venció Sara Hernández (la candidata de Pedro Sánchez) por un margen del 55% de los votos frente al 40% del candidato opositor, apoyado por Antonio Miguel Carmona. Entonces, una parte del socialismo interpretó las prisas para celebrar ese cónclave como una maniobra de Sánchez para garantizarse el sostén de una federación de pasados insurrectos ante una eventual derrota en las generales, hipótesis que este lunes cobró más vuelo.

En todo caso, Carmona apuntó que dará la batalla y que intentará forzar una votación entre los concejales para mantener su cargo. También adelantó que , si el PSM convoca, como está previsto, un congreso ordinario el próximo año para elegir secretario general, concurrirá como candidato. Por su lado, la dirección regional ofrece su propia versión sobre lo sucedido y esgrime tanto la necesidad de una renovación interna como el fracaso electoral el 24-M como motivo principal, que dejó al PSOE en tercer lugar en el Ayuntamiento de la capital, tras el PP y Ahora Madrid. Carmona admite que sus resultados fueron malos, pero los equipara a la derrota del PSOE en otras capitales como Barcelona, Valencia o Bilbao.