RENOVACIÓN EN EL SOCIALISMO

Rubalcaba condiciona el congreso abierto del PSOE a que haya "consenso"

"Mi capacidad es limitada. Este dirección está yéndose", reconoce el secretario general del PSOE

Alfredo Pérez Rubalcaba y Eduardo Madina, este jueves, 29 de mayo, en el Congreso de los Diputados.

Alfredo Pérez Rubalcaba y Eduardo Madina, este jueves, 29 de mayo, en el Congreso de los Diputados. / periodico

JUAN RUIZ SIERRA / Madrid

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Alfredo Pérez Rubalcaba ha condicionado este jueves la apertura del próximo congreso del PSOE, para que no voten los delegados al secretario general sino los militantes de forma directa, a que la fórmula goce de "seguridad jurídica" y "consenso". 

Desde que aparcaron las primarias y el aún líder del partido anunció su marcha debido a los malos resultados en las europeas, los socialistas se encuentran inmersos en un intenso debate sobre la forma de elegir a su nueva dirección. En principio, el cónclave del 19 y 20 de julio, que se celebrará en Madrid, iba a ser al uso, con delegados. Pero a principios de esta semana varios dirigentes territoriales comenzaron a reclamar la participación directa de los afiliados, según la fórmula de un militante, un voto, y el miércoles, uno de los favoritos para dirigir el partido, Eduardo Madina, señaló que solo se presentaría si esa era el sistema elegido. A partir de ahí, Rubalcaba inició una ronda de contactos con todos los líderes de las federaciones para explorar una fórmula que nunca se ha llevado a cabo en el PSOE y que, además, no aparece recogida en los estatutos. Pero ninguno de los barones quiere aparecer, al menos en público, como el responsable de hurtar la participación de las bases, así que todos declararon ver con buenos ojos el nuevo método.

"Esta propuesta del voto directo lleva tiempo en el PSOE. En la conferencia política del pasado noviembre, la posición de la ejecutiva era a favor, pero no hubo un consenso suficiente y lo aplazamos. Es razonable que ahora vuelva a surgir. Es pertinente y razonable. A mí la propuesta me suena bien. Pero para que esa propuesta se pueda llevar adelante hacen falta dos cosas: encontrar una solución jurídico-técnica adecuada y encontrar un consenso dentro del PSOE. Simpatizo con esa idea, pero solo puedo llevarla a la práctica en esas dos condiciones, porque yo estoy en un momento de salida. Estos cambios solo se pueden justificar si tiene un acuerdo amplio en el partido. Tengo las posibilidades que tengo y es así. Por eso no convoqué primarias. Tengo una capacidad limitada. Esta dirección está preparando un congreso para irse", ha señalado en el Congreso el todavía jefe de la oposición.

Sin preferencias

Ante las distintas interpretaciones que ha suscitado su renuncia y su presunto apoyo a tal o cual posible candidato a sucederle, Rubalcaba ha querido desmentir que impulse a Madina o a la poderosa presidenta de la Junta de AndalucíaSusana Díaz. "No tengo que hablar con los secretarios generales sobre a quién prefieren. Y no lo voy a hacer. Yo estoy para organizar un congreso y nada más", ha zanjado el secretario general, que con su rápida comparecencia en la Cámara baja ha intentado salir al paso de la imagen de un PSOE que se encuentra dividido sobre la fórmula para elegir al próximo líder.

"Lo que quiero transmitir es que este es un debate democrático, normal. Si encontramos una fórmula y un acuerdo suficiente, lo haremos. Es normal que pasen estas cosas. Es un partido vivo y democrático y la gente quiere participar. Con la fórmula actual también es democrático: los militantes votan a los delegados y estos votan al secretario general. Vamos a tratar de centrar esto en la normalidad", ha concluido.