38º ANIVERSARIO DE LA CARTA MAGNA

La reforma constitucional tendrá que hacer cola en el Congreso

IOLANDA MÁRMOL / MADRID

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Los trabajos de estudio preliminares para reformar la Constitución no comenzarán de inmediato y tendrán que esperar, por lo menos, de tres a seis meses. Aunque el Gobierno ha reconocido que está dispuesto a revisar la Carta Magna Gobierno  Carta Magnay los partidos acucian al Ejecutivo para hacerlo, lo cierto es que, operativamente, el trámite no puede comenzar todavía. No porque sea imposible, sino porque los grupos ya tienen pactado el cupo máximo de subcomisiones y entre las que han acordado no figura la modificación constitucional.

La presidenta del Congreso, Ana Pastor, reunió el pasado miércoles a los portavoces de los grupos parlamentarios. En el encuentro formalizaron el entendimiento para poner en marcha ocho subcomisiones: pacto educativo-Ley Orgánica de Mejora de la Calidad de Educación (Lomce); violencia de género y brecha salarial; autónomos; Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg); dependencia; pacto de reforma de la justicia; estatuto de tropa y marinería, y estatuto del artista.  Aunque apenas unas horas antes de la reunión, PSOE, Unidos Podemos y el Partit Demòcrata habían pedido explícitamente la reforma de la Constitución en  la sesión de control al Gobierno, lo cierto es que en la reunión con Pastor priorizaron otros asuntos.

Con ese reparto comprometido, el PSOE acudió el día siguiente (jueves) al registro a formalizar la solicitud de creación de una subcomisión para la revisión de la Carta Magna. Sus responsables sabían que tendrían que esperar. Fuentes parlamentarias han confirmado a este diario que la subcomisión no se podrá poner en marcha hasta que se lean las conclusiones de alguna de las que ya han sido aprobadas. El tiempo habitual va de tres a seis meses, pero dependerá en buena medida de los ritmos que quieran imprimir los diputados.

DOMÈNECH TEME UNA OPERACIÓN MAQUILLAJE

En paralelo, En Comú Podem está determinado a poner en marcha una comisión territorial. A diferencia de las subcomisiones, no existe un cupo máximo, y su creación se decide por votación en el pleno. Los ‘comuns’ están aún explorando cuál sería la acogida de la propuesta entre el resto de grupos, pero confían en que sea bien recibida para poder presentarla en las próximas semanas. El objetivo es abordar específicamente uno de los temas que más les preocupa: el encaje territorial y los conflictos entre administraciones. Su líder, Xavier Domènech, teme que este espinoso aspecto quede orillado del debate sobre la reforma de la Constitución si PPPSOE y Ciudadanos ponen líneas rojas a la reforma. Intuye que los autodenominados "partidos constitucionalistas" puedan blindar la revisión para que solo sea   un "maquillaje" que aborde la sucesión de la Corona, temas de regeneración y la reforma del Senado. La creación de una comisión específica sobre el modelo territorial, opina, haría visible el conflicto y permitiría avanzar en su resolución.

También el Partit Demòcrata quiere que la cuestión catalana se analice al margen, y en el próximo pleno presentará una moción, consecuencia de la interpelación que el pasado martes defendió para reclamar respuesta a los 46 puntos planteados por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, al Gobierno.

Justamente una de las inquietudes principales del Ejecutivo, como adelantó este diario, es que la oposición consiga parcelar diferentes aspectos de la reforma Constitucional y aprobar de forma fragmentada modificaciones, como la posibilidad de hacer un referéndum.