Rajoy recuerda a Aznar la crisis y le pide optimismo

Más de una vez ha dicho Mariano Rajoy, por distintas razones, que es muy fácil hablar cuando no se ocupa la silla de jefe de Gobierno. Seguro que también lo pensó el domingo cuando leyó las críticas que José María Aznar le dirigió desde las páginas de 'Abc', en las que le pedía una "rectificación enérgica" para reconquistar a los votantes que les han dado la espalda en las elecciones andaluzas, municipales y autonómicas. Rajoy prefirió no dar pie a que la polémica continúe y respondió con un "no tiene ningún sentido que responda a eso" --a los ataques de Aznar (presidente de honor del PP, por cierto)--, cuando la prensa le preguntó por este asunto. El jefe del Ejecutivo prefirió recordar a renglón seguido al que fue su mentor que España ha pasado una "etapa compleja" y ha superado "la mayor crisis en décadas", pero que ahora se puede afrontar la situación con optimismo.

El actual líder del PP reclamó que se valore el esfuerzo de los ciudadanos y aseguró que, como son tiempos "de mayor holgura presupuestaria", se podrán "recuperar algunas cosas de las que hubo que prescindir". El presidente del Gobierno intentó mostrarse comprensivo y afirmó que entiende que haya "muchas cosas que a mucha gente no le gustan", pero reclamó que "lo importante es el futuro". "España entra en una etapa mejor", añadió antes de destacar que el PP fue el partido más votado el 24-M. Según sus cálculos, si el PP revalida su apoyo en las urnas en las elecciones generales de finales de año y puede mantener las mimas políticas, España podrá crecer al 3% en la próxima legislatura y llegar a los 20 millones de ocupados.

Rajoy alardea ante Aznar de "unidad" e "ilusión"

SEGUIR LOS CONSEJOS

Aznar pudo convertirse este lunes en el protagonista de la actualidad por sus 'recomendaciones' públicas a Rajoy, pero el corralito griegocorralito griego mitigó las consecuencias de sus palabras. El presidente de honor del PP inauguró por la mañana el Campus FAES y aprovechó la visita del exmandatario francés Nicolas Sarkozy para aplaudir "la refundación" que ha llevado a cabo estos últimos meses en Francia, al renovar su Unión por un Movimiento Popular (UMP) y convertirlo en un partido nuevo: Los Republicanos. Ese renacimiento, esa renovación es la que le pide también a Rajoy Esperanza Aguirre, líder de la oposición en el Ayuntamiento de Madrid. Fue e una de las pocas dirigentes que alzó la voz para apoyar la idea de Aznar y reclamar al PP que "reaccione" ante el "castigo brutal" en las urnas.

Más atemperado, Jesús Posada, presidente del Congreso, aconsejó "tener en cuenta y leer con cuidado" los consejos del exjefe del Ejecutivo para que el PP pueda recuperar los votantes perdidos.

LA "SEMILLA RUPTURISTA"

También participó en la inauguración del Campus FAES la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que aprovechó su discurso para acusar a Artur Mas de cruzar "unos límites que hasta no hace mucho se consideraban infraqueables", y culpar de ello también al PSC y al PSOE. En su opinión, el tripartito y José Luis Rodríguez Zapatero, en la Moncloa, ayudaron a sembrar la "semilla rupturista" que ahora brota con Mas. "Para tapar y ocultar cuestiones muchas veces inconfensables, [Mas] está llevando a Catalunya a una situación de una auténtica fractura social, dentro de Catalunya y con el resto de España", denunció.

La secretaria general reivindicó a su partido como el único que defiende la soberanía española, ya que el PSOE se envuelve con la bandera pero "engaña" a los ciudadanos, dijo, porque pacta con nacionalistas, que "quieren dar al traste con la unidad y la solidaridad".