URNAS Y ESCÁNDALOS EN LA COMUNITAT VALENCIANA

Rajoy pasa de puntillas por el 'caso Rus' en su visita a Valencia

Alberto Fabra, Mariano Rajoy y Rita Barberá, durante el acto del PP celebrado ayer en Valencia.

Alberto Fabra, Mariano Rajoy y Rita Barberá, durante el acto del PP celebrado ayer en Valencia.

LAURA L. DAVID / VALENCIA

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Con el espectro del cadáver político de Alfonso Rus amenazando con tirar de la manta en cuanto pasen las elecciones del 24 de mayoMariano Rajoy se ha desplazado este martes a Valencia para participar en un acto programado con anterioridad a que estallara el último caso de presunta corrupción en las filas de los populares. El protocolo sentó a la derecha del presidente del Gobierno a Alberto Fabra. A su izquierda, mientras Rita Barberá daba la bienvenida desde el atril, se situó el recién estrenado presidente provincial del PP en Valencia, Vicente Betoret. No estaba, claro, el aún presidente de la Diputación y alcalde de Xàtiva en el edificio Veles e Vents, la sede de la Copa América de Vela, que ha quedado para albergar los grandes eventos en el PP, y que acogió un acto que pretendía comunicar la idea de que, expulsado Rus, la vida sigue como si nada en el partido.

Con el nombre del presunto contador de billetes en todos los corrillos, Rajoy utilizó una calculada ironía para descolgarse afirmando que el suyo es "el único partido que comete errores en España" pero también, añadió, el único que "cuando las cosas están difíciles, se arremanga, toma decisiones y es capaz de darle la vuelta a la situación". "A veces hemos cometido errores", concedió Rajoy en otro momento de su intervención, en la que defendió que, pese a ello, su partido "siempre ha estado al servicio de la sociedad".

Tenía Rajoy los datos del paro registrado en abril encima de la mesa y se aferró a ellos --"mueven, y mucho, a la esperanza", subrayó-- y a reforzar la idea de que el repunte de la economía demuestra que hay que "perseverar" en las políticas llevadas a cabo por el PP. "Lo demás es jugar con fuego", insistió Rajoy en referencia a la oposición.

En esa misma línea habló Fabra, que defendió al PP como el partido "de los resultados, del empleo, de la regeneración, y de las garantías de futuro". Un partido que, asumió, "no es perfecto, porque es humano y puede cometer errores" pero del que dijo que "ha sabido regenerarse". El presidente valenciano no dedicó una sola palabra a Rus ni a ningún otro de los casos de corrupción que han afectado al PPCV en la última legislatura.

"EL SEÑOR RUS"

En tono más beligerante, y también sin un ápice de autocrítica, Barberá --amiga y aliada hasta hace bien poco del alcalde de Xàtiva, al que desde este lunes llama "el señor Rus"-- arremetió contra toda la oposición, incluido Ciudadanos. De estos dijo Barberá que son los del "voto confundido", frente a una izquierda "movilizada y crecida". Y a todos ellos, agregó, solo les mueven los pactos "anti-PP". "Estamos solos contra todos. Todos están contra nosotros", sentenció.

Así pasó Rajoy de puntillas sobre el escándalo del 'caso Rus' en su primera visita a Valencia después de que se airearan varias conversaciones que supuestamente implican al exbarón popular en una trama de comisiones irregulares en torno a varias empresas públicas de la diputación. Pero existen más de 10 horas de grabaciones y, según Esquerra Unida, el partido que destapó el caso, lo que hasta ahora ha salido a la luz podría ser solo la punta del iceberg. Mientras Rajoy confía en que el escándalo se diluya sin nombrarlo, Rus sigue en Xàtiva atrincherado en sus cargos públicos y deshojando la margarita sobre si se retira o no del cartel para la alcaldía.