Rajoy llama a "desconfiar" de los que se unen en "armónica coalición" contra la lista más votada

No es habitual que un candidato visite un territorio que no tenga absolutamente bajo control, pero Mariano Rajoy decidió empezar esta campaña pisando tres feudos que al PP se le escaparon en las pasadas elecciones municipales. El conservador llegó en AVE a la ciudad de Alicante, se desplazó a Santa Pola para un breve paseo por la lonja del pescado y cerró el día con su primer mitin en Torrevieja. En las tres localidades el PP fue la lista más votada pero hoy gobiernan alcaldías de coalición. En el caso de Torrevieja, un pentapartito con el apoyo de Ciudadanos en el que Los Verdes y el PSPV-PSOE ostentarán la alcaldía dos años cada uno.

“Hay que desconfiar de aquellos que apoyan a los que sus electores no querían que apoyaran”, alertó Rajoy ante lo que consideró un “peligro convertido en realidad”, como el hecho de que Ciudadanos y Podemos se unan “en armónica coalición” para evitar que gobernara “el que la gente quería que gobernara”. A pesar de que Rajoy insistió en que hará una campaña “constructiva”, el candidato popular alentó así el fantasma sobre la posibilidad de que Albert Rivera, pese al no rotundo que ha dado hasta la fecha, pueda finalmente decantarse por apoyar un Gobierno progresista en el que se integre la formación morada.

Y mientras para Rajoy sus adversarios políticos ni tienen programa ni discurso y “quieren poner en riesgo la convivencia”, el conservador reivindicó sus medidas económicas y dijo que votar al PP es votar “seguro”, porque representa “respetar la voluntad de todos los españoles” y es, además, “lo más útil” para evitar el “extremismo” y la “radicalidad”.

Más allá de la cuestión de los pactos, Rajoy eligió la Comunidad Valenciana para empezar la campaña sabiendo que, pese al alud de casos de corrupción, el último CIS le sigue situando como primera fuerza allí, pero también que deberá pelear duro el escaño de más que el aumento de población le otorga a la provincia de València respecto al 20-D. Eso, sumado a que Alicante es una de esas circunscripciones en las que los restos de la ley D’Hondt les podrían otorgar un acta adicional hace que los populares vayan a redoblar sus esfuerzos en un territorio a donde Rajoy volverá para cerrar la contienda electoral.

EXALCALDE EN PRISIÓN

Sin embargo, llama la atención que el lugar elegido para abrir la campaña popular sea Torrevieja, donde Pedro Hernández Mateo (PP) gobernó desde 1988 hasta 2011 y fue condenado en 2012 por prevaricación y falsedad documental por la adjudicación de la contrata de basuras. Se convirtió en el primer diputado popular que entró en prisión en una legislatura en la que los conservadores llegaron a sumar hasta 11 parlamentarios imputados de manera simultánea. Sus compañeros hasta llegaron a hacer circular entre los escaños de Les Corts una petición de recogida de firmas para que se le indultase “por razones humanitarias”.