Rajoy aguarda en el banquillo un traspié de Sánchez

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, compareció este martes en La Moncloa antes de que Patxi López anunciara que el Rey le había propuesto la candidatura de Pedro SánchezPedro Sánchez a la investidura. Con rostro serio, comunicó que había trasladado al Monarca que “todavía” no tiene los apoyos necesarios para formar Gobierno, de ahí que considerara “razonable” que esta vez -después de haber declinado la primera oferta- Felipe VI no le ofreciera a él someterse a un pleno para intentar recabar los apoyos del resto de fuerzas. No obstante, el líder del PP dejó claro que no tira la toalla, que mantiene su candidatura y que cree que tiene posibilidades de revalidar su cargo, un vaticinio que implica el fracaso del líder del PSOE, Pedro Sánchez, en su intento de conquistar la MoncloaMoncloa.

Su estrategia pasa por tanto por aguardar en el banquillo y esperar a que el secretario general de los socialistas, cometa un traspié. Para contribuir a su descalabro, los populares prevén poner en marcha, como ha informado EL PERIÓDICO, una campaña parlamentaria y comunicativa de descrédito del posible acuerdo entre Sánchez, Podemos y otras fuerzas políticas, con mensajes dirigidos a los españoles y a las bases socialistas, que tienen que bendecir el pacto, según se ha comprometido Sánchez ante sus barones.

Como punta de lanza de esta táctica, Rajoy sentenció este martes que el resultado electoral del 20-D solo deja cabida para tres opciones: un Ejecutivo encabezado por él, con la complicidad de PSOE y C’s; convocar de nuevo a los españoles a las urnas; o un gobierno “radical” entre Sánchez, Pablo Iglesias y el “apoyo”, ya sea mediante el voto favorable o la abstención, de los partidos independentistas. En su opinión, esta alianza “heterogénea, contradictoria y experimental” no es “buena para España” ni lo que “quieren la mayoría de los ciudadanos”.

NO FAVORECERÁ UN ACUERDO PSOE-C'S

Rajoy no considera posible que Ciudadanos pueda alcanzar un acuerdo con Sánchez y Podemos, y por lo tanto da por hecho que el líder del PSOE necesitará de la connivencia de Convergència y Esquerra para ser investido. Eso sí, dejó claro que el PP “en ningún caso” va a favorecer con su abstención un Ejecutivo en minoría de socialistas y C's. Tampoco en el caso de Sánchez no contase con el apoyo de los diputados de Podemos, otra de las posibilidades que está en liza y que el aún presidente en funciones no mencionó entre las opciones con posibilidad de prosperar.

Eso sí, el líder del PP reiteró que, en ningún caso, dará un paso atrás aunque su renuncia sirviera para que, al final del proceso y ante un eventual fracaso del aspirante socialista, en España se pusiera en marcha la gran coalición que, en su opinión, han pedido los españoles en las urnas. El círculo cercano a Rajoy sostiene que este preferiría ir a unas nuevas elecciones, donde mantendría su candidatura, como este martes ha reiterado, antes que ceder el testigo a un compañero.  

NO DARÁ MARCHA ATRÁS

Por ello, este martes Rajoy reiteró que el PP ganó los comicios “con un candidato que va a seguir manteniendo” porque es un partido “serio” y que no le gusta hacer “experimentos” ni contravenir la “voluntad” de la sociedad. Y anunció que aprovechará las conversaciones que Sánchez ha anunciado que mantendrá también con el PP para intentar convencer al líder socialista de que renuncie a su empeño de conformar un Gobierno "progresista y reformista" y acepte sumarse a la opción “sensata y razonable” que le ofrecen los conservadores.