EL PULSO SOBERANISTA

Carles Puigdemont estrena su agenda exterior en Flandes y Bruselas

Puigdemont comparece ante la prensa, ayer.

Puigdemont comparece ante la prensa, ayer. / FERRAN SENDRA

FIDEL MASREAL / BARCELONA

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El primer viaje oficial del nuevo presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, estaba previsto que tuviera como destino París. Pero el trágico accidente de autobús de Freginals truncó los planes. Este sábado Puigdemont inicia un viaje de tres dias a Flandes y Bruselas que tiene como objetivo profundizar en las relaciones con la región flamenca, una comunidad nacional con la que el nacionalismo catalán tiene suscritos acuerdos desde 1992. El viaje incluye una visita a la delegación del Govern en Bruselas, el corazón de la UE, pero no se prevén contactos políticos con representantes comunitarios.

Puigdemont, acompañado por el 'conseller' de Exteriors, Raül Romeva, y el representante de la Generalitat ante la UE, Amadeu Altafaj, mantendrá contactos con el presidente de Flandes y el presidente del Parlamento federal belga, ambos en la ciudad de Gante. Con el presidente de Flandes, Geert Bourgeois, la relación del Ejecutivo catalán es fluida. El 'expresident' Artur Mas mantuvo el pasado año dos encuentros, en marzo y julio, tanto en Flandes como en Barcelona, para reforzar el programa de cooepracion entre ambos territorios.

PARALELISMOS POLÍTICOS

Es previsible que Puigdemont, como Mas, trace paralelismos políticos con la región flamenca, que se caracteriza por el fuerte sentimiento nacionalista, vinculado a su peso mayoritario en el PIB belga y la defensa de la lengua propia. En esta ocasión, se trata de una invitación del Gobierno flamenco a la Generalitat.

El domingo, Puigdemont se entrevistará con el presidente del Parlamento federal, Siegfried Bracke. Y el lunes se reunirá con los trabajadores y responsables de la delegación del Govern y, posteriormente, también con trabajadores de las instituciones europeas, representantes del sector privado y el Consell del Casal Català de Brussel·les. Al margen de la agenda institucional, es posible que Puigdemont se reúna con representantes de la alianza de liberales y demócratas, ALDE, con la que CDC mantiene vínculos directos.