González Pons responsabiliza a Camps de los contratos de Nóos

"El convenio tenía sentido porque estabaIñaki Urdangarin. Era deportista olímpico, dirigente deportivo y miembro de laFamilia Real. Es decir, tenía unos elementos que nadie en el mundo más podía reunir para ayudar a laComunidad Valenciana", dijo el vicesecretario de Estudios y Programas del PPEsteban González Ponsal juezJosé Castroen su declaración por el'caso Nóos', en la que descargó la responsabilidad sobre los acuerdos suscritos en torno a los fallidos Juegos Europeos en el expresidenteFrancisco Camps.

"A finales del mes de septiembre (2005), el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, propuso a las Cortes Valencianas que se celebraran enValencia[¿] los primeros JJ.OO. Europeos", relató González Pons al magistrado el pasado 19 de marzo. Con ese beneplácito político, le pareció "coherente" estampar su firma tres meses después, sin abundar en mayores conocimientos.

"La misma víspera de que el convenio se firmara fui informado, por parte de los servicios jurídicos de la Generalitat, de que Sociedad [la Sociedad Gestora para la Imagen Estratégica y Promocional de la Comunidad Valenciana que él presidió] iba a ser incluida y a partir de ahí vino la firma; no participé", sostuvo González Pons, quien definió su papel como el de "un espectador". Nóos acabó cobrando 382.000 euros por los juegos, que no llegaron a celebrarse.      

"Un no rotundo"

También se refirió González Pons a un almuerzo que mantuvo el 8 de junio del 2004 con Urdangarin, quien acudió a la cita, acompañado por el constructorEnrique Bañuelos, "para interesarse sobre la posibilidad de que fueran modificadas algunas normas urbanísticas", en concreto las del Parque Natural de El Saler de Valencia. A cambio de unos permisos de obra civil, proponían compensar con equipamientos deportivos, a lo que González Pons respondió con "un no rotundo".

A la causa también se han incorporado las declaraciones de responsables de diversas empresas privadas que contrataron al duque de Palma como consejero, a cambio de remuneraciones que oscilaban entre los 36.000 y los 222.000 euros anuales: Mixta Africa, Teléfónica, Motor Press Ibérica, Aceros Bergara, Licores Pernod Ricard, Lagaradère, Havas Media, Seeliger y Conde y Altadis.

En varios casos, los contratos son verbales y los directivos no acaban de concretar las labores desarrolladas por el yerno del Rey, ni los motivos que condujeron a su contratación para operaciones complejas y de difícil encaje en su curriculo profesional.