El Príncipe valora "el rigor" y "la seriedad" de los emprendedores

El Príncipe de Asturias ha pronunciado esta tarde un discurso en Barcelona en el que ha abordado los valores que deben regir cualquier proyecto en la vida y que, a su juicio, pasan por "el rigor, la seriedad y la coherencia". En un discurso en el Museu Nacional d'Art de Catalunya para presentar la Fundació Príncep de Girona, Felipe ha protagonizado un acto en el que el sabía que sus palabras iban a ser analizadas con lupa. Ha sido su primera intervención pública desde que la Casa del Rey anunciara, el lunes, que el marido de la infanta Cristina, Iñaki Urdangarin, no volverá a participar en actos oficiales por su supuesta implicación en el caso de corrupción Palma Arena.

Felipe, consciente del alcance de su discurso, ha medido mucho sus palabras, pero ha querido dejar claro cuáles son los principios que deben guiar el trabajo de la juventud y los emprendedores, sectores a los que va dirigido el trabajo de la Fundació Príncep de Girona. Y son muy distintos a los que parece que han regido las acciones del duque de Palma al frente del Instituto Nóos, una entidad supuestamente sin ánimo de lucro.

El Heredero ha dicho que en el actual contexto de "profunda crisis económica" es necesario trabajar con "la mayor responsabilidad". Felipe ha subrayado que esta institución catalana que él preside reconoce “el trabajo y el sacrificio” y anima a los jóvenes y nuevos empresarios a que “la capacidad de iniciativa individual vaya de la mano de la solidaridad”.

Garante de la continuidad

"Los momentos actuales son tiempos para el compromiso; la sociedad no debe permanecer indiferente frente a los problemas que nos afectan. Por ello, además de nuestras obligaciones, creemos que debemos asumir mayores responsabilidades para con los demás, aportando nuestro esfuerzo, talento e imaginación al interés común sin esperar mayor reconocimiento que la propia satisfacción de contribuir --en este caso-- a mejorar la vida y las expectativas de nuestros jóvenes", ha afirmado. En varias ocasiones, Felipe ha tomado como ejemplo el trabajo de la Fundació Príncep de Girona y ha dicho que valora de ella la "ambición honesta y transparente" que intenta imprimir a la juventud".

El Heredero también ha aprovechado, en una coyuntura en la que el caso Urdangarin ha dañado la imagen de la Corona, para reivindicar la institución y su propio papel como garante de la continuidad. Felipe ha asegurado que su voluntad es adecuar "la institución a los tiempos" actuales e "impular iniciativas que ayuden y resulten útiles a la sociedad".

"Servir con dedicación al Estado, al conjunto de los españoles; trabajar por los intereses generales y promover acciones o iniciativas que sirvan al interés común, constituyen para mí un compromiso personal inalterable y sin matices. Una tarea, en fin, a la que dedico mi vida y que forma parte de mis deberes y convicciones, especialmente tras mi juramento de la Constitución hace 25 años al cumplir la mayoría de edad", ha añadido.

Nuevos talentos

La Fundació Príncep de Girona echó a andar en marzo del 2009 impulsada por cuatro entidades de la sociedad civil catalana muy arraigadas en Girona, la Cambra de Comerç de Girona, la Caixa, la fundación Gala-Dalí y la Caixa de Girona. Su objetivo es contribuir a impulsar iniciativas sociales en el sentido más amplio y promover la educación y la formación de la juventud tanto en Catalunya como en el resto del país. La institución, de la que es presidente de honor Felipe, tiene carácter privado y sin ánimo de lucro y su financiación proviene de las donaciones que aportan los miembros de su patronato.

Cada año, la entidad celebra en Girona el Fórum Impulsa de jóvenes emprendedores que busca proyectar a nuevos talentos y proyectos para transformar la sociedad. A diferencia de los Premios Príncipes de Asturias, que distingue a personas consagradas en sus diferentes profesiones, la Fundació Príncep de Girona, galardona a los talentos emergentes.