Primera jornada de liga

La liga es un campeonato de 38 jornadas y ayer Jordi Pujol Ferrusola jugó el primer partido y ganó los tres puntos al salir de rositas tras declarar en la Audiencia Nacional. El juez Pablo Ruz le mantuvo la imputación de delito fiscal y blanqueo de capitales y también los mismos derechos que al resto de los mortales. El fiscal general del Estado, Eduardo Torres Dulce, defendió la actuación de sus subordinados, que no reclamaron ninguna medida contra el hijo del expresidente de la Generalitat: «La investigación está en fase embroniaria». Una versión que en la que también coinciden fuentes jurídicas que explicaron que en los despachos de los jueces no se limitan derechos fundamentales, como la libertad, por tertulias o estados de opinión.

El efecto Vicky

Fuentes jurídicas reconocieron ayer que la investigación contra el primogénito de los Pujol empezó con mal pie. Se inició tras la denuncia de la exnovia de Pujol hijo, Victoria Álvarez, que le acusó de haber movido dinero negro desde Andorra a Madrid y de trasladar mochilas con fajos de billetes de 500 euros. Una denuncia que rápidamente llegó a los medios de comunicación y que impidió a la policía, la fiscalía y el juzgado trabajar como hacen en otros casos de corrupción.

Lo normal es practicar estas complejas investigaciones bajo el secreto de las actuaciones para jugar con el factor sorpresa, explicaron fuentes jurídicas. Así ocurrió, por ejemplo, en el caso Gürtel. La policía y la fiscalía anticorrupción manejaron los tiempos y durante casi un año fueron recabando pruebas contra los jefes de esta trama de corrupción: Francisco Correa, Pablo Crespo y Antoine Sánchez, que fueron detenidos cuando se sospechó que podrían darse a la fuga. Sin embargo, en el caso Pujol los investigadores han ido detrás de las revelaciones de Álvarez.

Estas fuentes explican que ahora cuentan con un informe policial, el archiconocido de la UDEF, que asegura que Pujol hijo cobró comisiones de empresas que lograron adjudicaciones de administraciones catalanas, para tirar del hilo. Además, el primogénito de los Pujol ofreció explicaciones, aportó documentación y aclaró sus negocios en sus cinco horas de comparecencia ante el juez. Esta versión será ahora contrastada por el juzgado que podría llamar a declarar, por ejemplo, a los empresarios que trabajaron con Pujol Ferrusola.

A pesar de que la fiscalía anticorrupción se sintió «decepcionada» con las explicaciones del primogénito, optó por esperar a que avance el campeonato, o lo que es lo mismo, la investigación, para cambiar de postura.

«Las modernas sociedades deben tender a que el concepto de presunción de inocencia, de acumulación de pruebas, primen fundamentalmente sobre conceptos de escándalo social que todos podemos compartir», señaló Torres Dulce. Y es que nada ha cambiado en esta investigación que empezó hace un año y ocho meses que justifique, según fuentes jurídicas, la restricción de derechos a Pujol hijo. «No existe riesgo de fuga», explicaron. Y agregaron: «A estas alturas, tampoco de destrucción de pruebas».

Otro gallo cantará en la previsible siguiente cita de Jordi Pujol hijo si la investigación judicial logra que además de ruido haya nueces. Continuará.