Sánchez afirma que no piensa dimitir aunque el comité federal tumbe su propuesta de congreso

LAURA PUIG / GEMMA ROBLES / BARCELONA / MADRID

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El secretario general del PSOEPedro Sánchez, ha anunciado este martes que no tiene ninguna intención de dimitir si la propuesta que presentará este sábado en el comité federal para convocar un congreso es finalmente rechazada. "No me planteo dimitir, estoy asumiendo mi responsabilidad (...). Por supuesto que no dimitiré", ha subrayado durante una entrevista en la cadena SER al día siguiente del órdago que lanzó a los críticos del partido, intentado forzar unas primarias y un congreso para poner fin a la guerra interna.

Como era previsible, esa afirmación ha resultado polémica. La propia presidenta del partido, la andaluza Micaela Navarro, ha subrayado que su juicio el líder sí debería marcharse en caso de que el Comité rechazara su hoja de ruta el próximo sábado. En los pasillos del Congreso, Navarro ha sido preguntada sobre este asunto y aunque ha dicho desconocer lo que dicen los estatutos internos sobre esta cuestión puntual sí ha enfatizado que no recuerda, a lo largo de la historia de su organización, un secretario general que haya perdido una votación que haya propuesto.

En lo que va de día la prensa también ha interrogado a otros dirigentes del PSOE sobre la jugada de su jefe, así como su intención de permanecer en el cargo pase lo que pase el próximo 1 de octubre. Tanto el portavoz en la Cámara Baja como en el Senado, Antonio Hernando y Oscar López, respectivamente (en principio miembros del núcleo duro de Sánchez), han evitado dar a conocer sus opiniones y se han limitado a remitirse a lo dicho ya por su secretario general. Más clara ha sido la secretaria de estudios y programas de la formación, Meritxell Batet, quien sí ha respaldado la idea de que el hecho de que su líder perdiera una votación como la del Comité no signifca, a su entender, que tenga que tirar la toalla. Y ha aprovechado la ocasión para instar a los que piensan que es necesario "otro proyecto" y "otro rumbo" a que den un paso al frente cuanto antes.

EN JUEGO EL FUTURO DE LA SOCIALDEMOCRACIA

En esta misma línea se ha pronunciado Sánchez en su entrevista radiofónica. De hecho en varias ocasiones ha incidido en que después de qye se hayan puesto reiteradamente en cuestión sus decisiones como secretario general ha llegado el momento de "poner las cartas encima de la mesa". A su juicio, los militantes deben de terciar en el debate sobre si el PSOE debe, con su abstención, facilitar un nuevo ejecutivo del PP o bien emplearse a fondo en la articulación de una alternativa, como propone Sánchez.

Ha censurado que los dirigentes críticos hablen de "reflexión cuando quieren decir abstención" y ha enfatizado que lo que está en juego con el debate sobre la postura del PSOE "no es una cuestión táctica", sino "ideológica" y "esencial para el futuro de la socialdemocracia a medio y largo plazo". "Es como cuando se planteó el PSOE si debía abandonar o no el marxismo", ha ejemplificado. "Como líder del PSOE lo que no puedo hacer es que se me intente imponer una decisión que no comparto para administrarla", ha añadido.

Asimismo, Sánchez ha retado a los críticos a que planteen una solución para zanjar la crisis interna y la defiendan ante los militantes, incluso si esta solución pasa por la abstención: "Es hora de plantear un debate en serio, decirnos las verdades y que cuando los militantes voten se oiga solo una voz". Sobre el dilema de Rajoy o terceras elecciones, en el que no se había querido posicionar nunca, el líder del PSOE ha considerado que antes que apoyar un Gobierno de la derecha es mejor repetir de nuevo los comicios. "Para un país, para una democracia, unas elecciones nunca son una mala solución. Lo que es una mala solución es que desde la izquierda se indulte a Rajoy", ha manifestado 

SOLUCIÓN PARA CATALUNYA Y CRISIS EN CASTILLA-LA MANCHA

Sánchez ha reiterado su intención de configurar una altenativa a Rajoy y, para ello, ha asegurado estar dispuesto a hablar con Podemos Ciudadanos, a plantearse un gobierno de coalición, con independientes y que a los dos años se someta a una cuestión de confianza. Y ha asegurado también estar dispuesto a hablar con los nacionalistas catalanes, al tiempo que ha vinculado su propuesta con ofrecer una salida definitiva a la crisis catalana. "Rajoy ha dejado una crisis institucional, territorial y social que exige, a mi juicio, un planteamiento alternativo", ha añadido. No obstante, ha considerado que hasta que no se aclare el rumbo del partido difícilmente podrá iniciar la interlocución con sus posibles socios.

Por otra parte, el secretario general ha censurado la ruptura del pacto entre PSOE y Podemos en Castilla-La Mancha, a instancias de los últimos. A su modo de ver, responde a las "debilidades y contradicciones" del partido morado y su "debate interno" acerca de la relación que deben mantener con los socialistas. No obstante, Sánchez ha admitido que todavía no ha hablado con el presidente castellanomanchego, Emiliano García-Page, sobre esta nueva crisis --Page es uno de los dirigentes socialistas que más reticencias ha mostrado a la hoja de ruta planteada por Sánchez--, aunque ha subrayado que tanto él como el mandatario extremeño, Guillermo Fernández Vara --que también gobierna con ayuda de Podemos-- tienen "el apoyo del secretario general".