EL EXPOLIO DE UNA ENTIDAD CULTURAL

El Palau de la Música solo ha recuperado una sexta parte del saqueo

Fèlix Millet y Jordi Montull, en el juicio del 'caso Palau', el pasado 1 de marzo

Fèlix Millet y Jordi Montull, en el juicio del 'caso Palau', el pasado 1 de marzo / VIOLETA GUMÀ

J. G. Albalat

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El Palau de la Música solo ha recuperado el 17% de la cantidad presuntamente saqueada por sus exdirectivos Fèlix Millet y Jordi Montull. Cabe recordar que la entidad cultural atribuye todo el desfalco a los que eran sus máximos responsables, pero no acusa a Convergència Democràtica ni a su extesorero Daniel Osàcar. Del total de los 34,1 millones de euros que reclaman por la vía judicial la Fundació Orfeó Catalá-Palau de la Música, la Associació Orfeó Català y el consorcio público (Generalitat, Ayuntamiento de Barcelona y Ministerio de Cultura), las tres patas que sostienen la entidad, solo han regresado a las arcas del auditorio barcelonés 5,9 millones. [Sigue las últimas noticias sobre la sentencia del 'caso Palau' en directo.]

Fuentes del Palau de la Música han concretado a este diario que la fundación y la asociación han elevado a 30.630.611 euros la cantidad desviada por el exequipo directivo del auditorio en la última época en la que Millet era su presidente (tuvo que abandonar el cargo en el 2009, cuando los Mossos registraron las oficinas). De esta suma, el Palau se ha resarcido con 3.491.000 euros. El consorcio, por su parte, reclama 3.650.000 euros, de los que ha recuperado 2.419.000 euros.

En septiembre del 2009 fue la primera vez que Millet y Montull, que todavía no habían declarado ante el juez, reconocieron haberse apropiado de 1,6 millones de euros y 200.000 euros, respectivamente, de fondos del Palau para fines particulares, entre otros obras en viviendas particulares y viajes exóticos al extranjero. Los dos depositaron entonces esa cantidad en el juzgado. Después se han producido nuevas aportaciones. El fiscal eleva el fraude a unos 20 millones de euros.

La fundación de CDC

En estas partidas no se contabilizan las cantidades que la Fundació Trias Fargas (después CatDem), vinculada a CDC, se comprometió a devolver en noviembre del 2009. El acuerdo establecía que la fundación convergente devolvería los 630.000 euros que el Palau les había donado en ocho plazos, a razón de 79.000 por año desde el 2010 hasta el 2017. Es decir, si se ha cumplido el acuerdo, ya se ha cubierto esta cantidad.

El acuerdo entre la Fundació Trias Fargas y los responsables del auditorio llegó después de semanas de tira y afloja entre el Palau y el partido, que se resistía a devolver íntegramente las cantidades que, insistieron en su día en CDC, salieron "ilegítimamente" de la entidad cultural sin que el partido lo supiera. Y es que Millet no estaba autorizado a firmar los convenios que el Palau y la Trias Fargas cerraron entre 1999 y el 2008. Estos convenios deberían haber pasado por la junta directiva del auditorio y no fue así.

El entonces secretario general de CDC, Artur Mas, se vio obligado a reaccionar cuando salió a la luz pública la existencia de estos convenios. "El expresidente del Palau [Millet] no tenía poderes para firmar convenios. El Palau reconoce que CDC y la Fundació Trias Fargas actuaron correctamente", aseguró Mas en noviembre del 2009.

De la música catalana al partido de Colom

Los citados convenios ocupan solo una página y comprometían a la fundación convergente a llevar a cabo un programa de actos muy inconcreto. Los textos de cada uno de ellos son prácticamente calcados. La Trias Fargas afirmaba año tras año que continuaría desarrollando "una serie de actividades destinadas a dinfundir entre capas populares tanto la música como los compositores catalanes, con independencia del estilo y género, tal y como inició en 1999", punto de partida de los convenios.

Otra de las personas que se comprometió a devolver dinero al auditorio es Àngel Colom,Àngel Colom, que percibió de Millet 12,5 millones de pesetas (75.126 euros) en el año 2000 para sufragar los gastos contraídos tras la disolución del Partit per la Independència (PI), en 1999. Durante el juicio, el exdirigente de CDC aseguró que el convenio en el que aparece su firma y que justificaría no solo la entrega de este dinero, sino de otros 12,5 millones de pesetas, es falso y no reconoció ni su rúbrica. Eso sí, durante su interrogatorio se negó a desvelar quién le había dicho que acudiera a Millet para recaudar los fondos.