REACCIONES AL ACUERDO SOBERANISTA

La oposición se ensaña con Mas y la CUP

Ciutadans, PSC, Catalunya Sí que es Pot y el PPC califican de fraude la investidura de Puigdemont

Fernando de Páramo (derecha), junto a la líder de C's en el Parlament, Inés Arrimadas, y el diputado Carlos Carrizosa, el pasado enero.

Fernando de Páramo (derecha), junto a la líder de C's en el Parlament, Inés Arrimadas, y el diputado Carlos Carrizosa, el pasado enero. / periodico

RAFA JULVE / BARCELONA

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Toda la oposición, y ya se puede decir toda visto el papel que tendrá la CUP, ha despreciado la renuncia de Artur Mas en pos de Carles PuigdemontArtur MasCarles Puigdemont y no ha escatimado en descalificativos sobre el acuerdo soberanistaacuerdo soberanista. Tampoco la fuerza anticapitalista ha escapado de las críticas.

Inés Arrimadas ha afirmado que el paso atrás de Mas es la "constatación de un fracaso", tanto personal como del proceso soberanista, que solo "alarga la agonía". Para la líder de Ciutadans en el Parlament, los independentistas han tenido miedo a celebrar elecciones porque su plan se desinfla y han cometido un "fraude democrático" con el que se situará al frente del Govern a una persona, Puigdemont, "que ha instrumentalizado las instituciones como Mas". El hasta ahora alcalde de Girona es presidente de la Associació de Municipis per la Independència.

"CORREGIR" LAS URNAS

Como Arrimadas, el socialista Miquel Iceta ha considerado que la actitud del líder de CDC esconde la intención de "ganar tiempo para refundar su partido". El líder del PSC y los de otros partidos han incidido además en la expresión de Mas de "corregir" el mandato de las urnas para denunciar su comportamiento "antidemocrático".

En cuanto a la CUP, Arrimadas ha opinado que queda "anulada"; Iceta, que estará "impúdicamente" subordinada a Junts pel Sí, y el líder parlamentario de Catalunya Sí que es PotLluís Rabell, que su actitud es "humillante" porque "asegura la investidura del testaferro de Mas". Solo el popular Xavier García Albiol ha dado la "victoria" a los anticapitalistas ante un Mas que "muere matando" y que ha convertido la presidencia "en una subasta".