Un modelo de corte federal

Primero iba a ser en septiembre, después en octubre y ahora ya van por la primera semana de noviembre. Ciudadanos ha aplazado hasta los primeros días del próximo mes la presentación de la reforma de la Constitución que plantea, un elemento clave para conocer qué tipo de Estado defiende. Hasta ahora, el presidente del partido, Albert Rivera, ha dicho en numerosas ocasiones que quiere un modelo de corte federal, bastante parecido al actual, añade siempre. El partido naranja no propondrá recentralizar las competencias de sanidad ni de educación, aseguran fuentes de la dirección, pero sí que cree necesario aclarar las competencias que son exclusivas de los municipios, las autonomías y el Estado y cómo se financian.

En opinión de Ciudadanos, además de la Carta Magna, que están revisando para encajar este asunto, deberán retocarse varias leyes orgánicas, como la de la financiación autonómica. En este punto, la fuerza de Rivera defiende acabar a medio plazo con el concierto vasco y la aportación navarra por considerarlo injusto para el resto de comunidades autónomas.

El político catalán subraya la necesidad de hacer frente a una serie de reformas en profundidad para acabar con la corrupción, cambiar el modelo económico, despolitizar la justicia, regenerar la democracia y la vida interna de los partidos, que calcula que se tardarían dos años en ponerlas en marcha y otros dos como mínimo para empezar a ver sus frutos.

SIN REFERÉNDUM

Esa nueva España resultante de esa intensa fase de reformas ayudaría, según su tesis, a "ilusionar" a los ciudadanos, en especial a los que en los últimos años se han visto tentados por las tesis independentistas. Es la solución que propone para superar el reto soberanista. Rivera no quiere, y lo ha dicho varias veces en campaña, un referéndum sobre la secesión.

Respecto a la Monarquía, el líder de Ciudadanos considera positivo el relevo en el trono. "Felipe VI no es el problema", declaró en una entrevista con este diario en abril. El dirigente catalán considera que si el jefe del Estado sigue en la línea de "no meterse en política" pero "buscar la conciliación" y defender los intereses españoles en el extranjero, ellos no plantearán cambios. "Si un día la Monarquía no sirve a esos intereses, nosotros decidiremos", añadió.