La moción de censura, ¿un regalo divino para el 'procés'?

¿Estará el referéndum incluido en el texto de la moción de censura que Podemos registrará en las próximas semanas contra Mariano Rajoy? Sí, aunque la fórmula de encaje está por definir. Fuentes de En Comú Podem, socios catalanes de los morados, confirman a EL PERIÓDICO que la consulta estará necesariamente presente en la iniciativa. "No renunciamos a nada y, por lo tanto, el derecho a decidir estará como siempre en nuestras propuestas. Ahora mismo nuestro objetivo es echar al PP", explican.

La intención, aunque todavía no esté negro sobre blanco en un documento, la dio a entender también este jueves la portavoz parlamentaria de Podemos, Irene Montero, en unas declaraciones en el Congreso que desataron sentimientos enfrentados en los partidos catalanes: ERC la considera una oportunidad dorada y PDECat la mira de reojo.

Los republicanos han recibido el anuncio de la moción de censura exultantes. Lo ven como "un regalo de los dioses" y se sienten "profundamente agradecidos" a Pablo Iglesias porque esta iniciativa les brinda la posibilidad de llevar el espinoso tema del referéndum al pleno del Congreso de los Diputados, en una sesión que captará toda la atención mediática.

UN ESCENARIO SIMBÓLICO

El portavoz republicano, Joan Tardà, confirma a este diario que su partido lo observa como una oportunidad de oro para debatir en profundidad sobre la cuestión catalana en un escenario simbólico y, sobre todo, por el perfil del público que previsiblemente seguirá esta sesión. Los simpatizantes de En Comú Podem, favorables al derecho a decidir, y los netamente independentistas estarán pendientes de los discursos que analizarán el conflicto al que Catalunya se enfrenta en el horizonte del final del verano. Tardà insiste: "El punto de encuentro no está en el 'sí', sino en la consulta". Está convencido de que, más allá de las disputas partidistas, el momento histórico requiere la unidad de la izquierda catalana.

ANTES PIQUES, AHORA UNIDAD

A nadie se le escapa que ERC y En Comú Podem se disputan un nicho de electorado importante en un territorio que es clave para los morados. Esa pugna se evidenció en las contiendas del 20-D y el 26-J, con piques sonados entre ambas formaciones, como cuando se presentó la candidatura para que el líder de los 'comuns', Xavier Domènech, presidiera el Congreso, y que terminó con una enganchada de tuits cruzados.

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También hubo tensión en el debate televisivo que mantuvieron el portavoz de ERC Gabriel Rufián y el entonces secretario Político de Podemos, Íñigo Errejón, en plena campaña. El republicano se dedicó a asediar duramente al podemista, que reconocía tiempo después haberse quedado helado con un ataque que no esperaba y que finalizó con un golpe magistral de Rufián. "Ustedes sueñan con tener en el futuro el país que nosotros ya hemos conseguido", sentenció.

Desde junio hasta ahora la marea parece haber bajado. Esquerra pide estar unidos y ya ha anunciado que, si el texto de la moción de censura incluye un apoyo explícito al referéndum para la segunda quincena de septiembre, la apoyarán sin tener en cuenta las posibilidades de éxito o si los podemistas deciden registrarla antes o después de que el PSOE tenga nuevo líder.

El próximo miércoles Tardà se reunirá con Iglesias y Domènech en el Congreso y el republicano confirma a este diario que este será el requisito sine qua non para obtener su respaldo. Los podemistas deberán ver cómo encajar la consulta en el texto para que En Comú Podem no salga perdiendo en beneficio de ERC. 

NO VALE FRIVOLIZAR

El PDECat no ha anunciado cuál será el sentido de su voto y prefiere esperar a que Iglesias le explique en persona el próximo jueves cuál es la propuesta y cuál es el objetivo. El portavoz parlamentario Carles Campuzano advierte de que no respaldará una moción que "banalice" el debate sobre el referéndum en un "mero ejercicio de agitación y propaganda". A su juicio, el objetivo final de la iniciativa no es tanto tumbar el Gobierno de Rajoy como dañar al PSOE, principal rival electoral de los podemistas. En ese juego, el PDECat no quiere entrar, porque considera que la consulta es una "cuestión nuclear" que no puede quedar a los pies de los caballos por el uso partidista de los morados. 

"No queremos contribuir a una moción que frivolice con el referéndum. Así que esperamos a hablar seriamente", señala Campuzano. No comparte con ERC que esta sea una oportunidad "de los dioses" para introducir en el pleno del Congreso un debate sobre el referéndum y explica que esta próxima semana el PDECat preguntará al Gobierno por el referéndum.