Mas se recupera

Mientras esperamos que alguien explique de manera convincente por qué, a los ojos del mundo, Madrid reacciona de forma tan contraria a los propios intereses, los catalanes nos dedicamos a contarnos y recontarnos. ¿Son mayoría suficiente los independentistas? ¿Existen los indecisos o casi todos los que se califican como tales son contrarios a la independencia que prefieren no manifestarlo?

En tiempo de incertidumbre, los antiguos recurrían a los oráculos, ahora preferimos las encuestas, o eso hemos convenido. Pues bien, según el sondeo publicado ayer por este diario, que mantiene el récord de aciertos, Mas y Junqueras empatan, con una mínima ventaja para el 'president'; Podemos se planta como tercera fuerza, y el resto de partidos catalanes se hunde, salvo Ciutadans, que se mantiene. Con el 9-N, Mas se ha fortalecido mientras que Junqueras se equivocó al principio, como Herrera, cuando rompieron la unidad con la intención de debilitarle. La prohibición del Gobierno, vía Constitucional, hizo el resto. El 'efecto Podemos' queda muy debilitado en relación a su ascenso fulgurante en toda España, pero puede ser determinante. Podemos se alimenta de los unionistas de Ciutadans que ven a Rivera demasiado a la derecha, de desencantados del PSC y de los no independentistas de ICV, mientras que Ciutadans se harta de votos del PP hartos de corrupción.

Más allá de dichos movimientos, el sondeo sugiere la existencia de dos bloques en formación, con grados muy diversos de coherencia interna. A un lado, los impulsores del 9-N, que pierden fuerza en conjunto, y al otro los contrarios al derecho a decidir. La suma de CiU, ERC ICV y la CUP, que como bloque habría pasado, si se permite la hipótesis, de soberanista a independentista, sería de 84 escaños como mucho y de 79 a la baja. La aún más heterogénea suma de los demás, Podemos, C's, PSC y PP, se movería entre los 51 y los 56 diputados. En estas circunstancias, y contando con el inestimable estímulo de las contramedidas de Rajoy, las evidentes dificultades para una alianza gubernamental estable podrían ser enmascaradas por una fuga hacia adelante de los independentistas, aunque no contaran con los dos tercios del Parlament. No es seguro (hoy no hay nada seguro), pero sí lo más probable.

Últimas preguntas, a la triple luz de la fluidez de la situación, la consolidación de Mas como líder principal del independentismo y la perspectiva de plebiscitarias en los próximos meses. ¿Aumentará la participación hasta más allá del 80% o incluso el 90% por la demanda de un mandato democrático para la independencia de unas cuantas fuerzas? ¿Podría parar el ascenso de Podemos, o revertirse, por formar parte del bloque contrario a la independencia, junto al PSC, C's y sobre todo al PP?