Mas defiende en 'Le Figaro' que el proceso "no tiene nada que ver con el nacionalismo"

El diario francés 'Le Figaro' publica este sábado un artículo de opinión del presidente de la Generalitat, Artur Mas, titulado 'Catalunya quiere elegir su futuro'. Mas asegura que "la voluntad de los catalanes de poder decidir su futuro no tiene nada que ver con el nacionalismo". Y advierte Mariano Rajoy que "esconderse detrás de la Constitución española, que no ha sido votada por ningún ciudadano nacido después de 1960, es la prueba de un coraje político pobre". El artículo de Mas se puede leer en el faldón de la página 18 de la sección de Opinión 'Champs Libres. Debates', de la edición de este fin de semana del decano de la prensa francesa.

Esta es la carta del 'president':

"No pedimos nada que no se haya reconocido ya a otros pueblos", recuerda Mas a los lectores de 'Le Figaro', poniendo como ejemplo Escocia, Quebec, Lituania y Montenegro. "Queremos que se nos trate de la misma manera y que se nos reconozca este derecho natural y universal", reclama el presidente. "Es sorprendente que en pleno siglo XXI, haya todavía pueblos que tengan que reclamar este derecho", se queja Mas.

En su artículo de opinión, Mas explica que "7 de cada 10 catalanes tienen un origen, más cercano o lejano, fuera de Catalunya", no solo "de otras regiones de España" sino "también de Rumania, Italia, la India o Marruecos, así como de Francia". "La lengua catalana es todavía minoritaria en Catalunya", añade el presidente. Por todo ello, "seríamos irresponsables si pretendiéramos construir, sobre esta realidad, un proyecto político nacionalista", insiste. Mas asegura que "ni el Gobierno catalán ni los propios catalanes tienen ningún problema con los ciudadanos españoles, al contrario". Y se muestra convencido de que "una parte significativa de los ciudadanos españoles respetan el derecho de los catalanes a decidir su futuro".

FRONTERAS

Mas niega querer "levantar fronteras" y defiende que la Catalunya independiente sería "siempre un aliado fiel de Europa y de los valores que representa". El presidente recuerda que "el catalanismo siempre ha sido, es y será un movimiento profundamente europeísta" y que "el fenómeno euroescéptico y populista no se ha implantado nunca en Catalunya". Y pone como ejemplo que todos los eurodiputados catalanes elegidos el pasado 25 de mayo son pro-europeos. "El proyecto político que queremos adoptar es el que permitirá construir un país libre, integrador, fraternal, unido en torno a valores compartidos y plural en su diversidad", promete.

El presidente denuncia que "el Gobierno español ha intentado bloquear hasta el último momento" el 9-N "con argumentos legales y jurídicos, sin querer entender que este movimiento tiene un origen político que requiere, de forma evidente, una solución política".