Mas pide aunar el voto agitando el miedo a un pacto PP-Ciudadanos

El 'president' en funciones y líder de Convergència, Artur Mas, ha echado el resto en el último acto de campaña en Barcelona agitando el espantajo de los efectos negativos que tendría para Catalunya, a su juicio, un posible pacto entre el PP y Ciudadanos tras las generales. De este modo ha hecho lo que lleva haciendo CDC en toda la campaña: tratar de movilizar a los suyos y al conjunto del soberanismo. "Si nosotros no vamos, los otros irán, los otros estarán", ha advertido, parafraseando un viejo lema del PSC respecto al Gobierno del PP de José María Aznar, aquel "si tu no vas, ellos vuelven".

"Cerrad el paso a un gobierno entre el PP y Ciudadanos, que la única cosa que hará es ir contra los grandes proyectos y sueños de Catalunya", ha pedido el líder convergente en un tono enérgico. Y el mensaje no ha podido ser más explícito, respecto a la necesidad de dar continuidad al proceso soberanista este domingo, incluso pidiendo el apoyo de electores de la CUP: "Que todo esto tenga continuidad y sentido en las urnas y la gente que votó el 9-N o la que votó a Junts pel Sí y la CUP el 27-S que llenen las urnas para reafirmar la soberanía de Catalunya”.

LIGERO OPTIMISMO

CDC, en su marca electoral Democràcia i Llibertat, ha cerrado campaña con un ligero optimismo. Porque confían en que pese al posible cansanco o desánimo del soberanismo, el militante fiel acudirá a las urnas. Y porque esperan que PP y Ciudadanos no sumen mayoría absoluta porque el partido de Albert Rivera tiende a la baja, lo cual puede favorecer un resultado digno, que es a lo que aspira CDC. "El domingo Democràcia i Llibertat ganará las elecciones en Catalunya", se ha atrevido a afirmar en el último mítin en cabeza de lista por Girona, Jordi Xuclà.

Pero el protagonista absoluto es y ha sido Mas. 'País, procés, president', es la tríada que resume los discursos electorales. Por la mañana, en rueda de prensa, cargando contra "la atrofia de liderazgo" de Mariano Rajoy y contra los "tics casi predemocráticos" del Estado. Pero, sobre todo, insistiendo en la necesidad de que el votante independentista no se abstenga el 20-D para mantener vivo el proceso soberanista. El discurso del 'president', en tono épico, ha incluido un pequeño dardo a Esquerra: una clara reivindicación de lo que representó Junts pel Sí.

CUÁNDO LLEGARÁ LA INDEPENDENCIA

Mas tambien, casi entre líneas, ha recordado que el resultado de las elecciones del 27-S no permite proclamar a la independencia, en términos plebiscitarios. Ha afirmado que la independencia "llegará cuando tengamos las mayorías en Catalunya y estamos muy cerca, el 27-S nos pudimos contar también contra pronóstico”.

El cabeza de lista, Francesc Homs, que ha disparado algún dardo a ERC por haber hecho 'president' al socialista José Montilla, también ha subrayado la necesidad de superar la frialdad del inicio de campaña para tratar de alcanzar un buen resultado e incluso la victoria, agitando también el espantajo de que el PP, el PSC, Ciutadans y Podem actuarán contra los intereses de Catalunya. Y lanzando un nuevo homenaje a Mas, erigido en casi candidato. "Estamos contigo porque eres útil al servicio de la causa justa y noble", ha proclaamdo con el público en pie.

El mítin final de CDC ha servido para los discursos más inflamados, como el de la expresidenta del Parlament y ahora dirigente de Demòcrates de Catalunya, una desatada Núria de Gispert, pidiendo que" Duran Lleida no saque ningún escaño". Una andanada que obtuvo la ovación de la noche de las bases de un partido que hasta hace seis meses estaba coaligado con el de Duran, y del que de Gispert también formaba parte.