Margallo cree que la reforma constitucional es "posible y deseable" y que sólo puede hacerla una gran coalición

El ministro asegura que Rajoy "está dispuesto" a hablar de cambios constitucionales siempre que "no se pisen líneas rojas"

El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, este jueves durante la presentación de un libro.

El ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, este jueves durante la presentación de un libro. / periodico

EL PERIÓDICO / MADRID

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Mientras Mariano Rajoy solo abre la puerta a embarcarse en una reforma de la Constitución cuando algún periodista le pregunta si estaría dispuesto a acceder a modificar la Carta Magna a cambio del apoyo del PSOE y C's a su investidura, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, se ha erigido este jueves en portavoz del jefe del Ejecutivo en funciones y ha señalado que el líder del PP está "dispuesto" a hablar de cambios constitucionales porque una reforma de la ley de leyes es "posible y deseable". 

Durante su discurso en la presentación del libro 'Historia de la política exterior española en el siglo XX y XXI', Margallo ha asegurado que Rajoy "está dispuesto a hablar de una reforma constitucional, siempre y cuando se cumplan determinadas condiciones o bien no se pisen líneas rojas" como la soberanía nacional.

Para el jefe de la diplomacia española, esa reforma es "posible y deseable" porque la Carta Magna tiene "algunos defectos de diseño" como el reparto de competencias o la financiación autonómica y "defectos de funcionamiento" como la "falta de coordinación entre administraciones".

Pero eso sí, el ministro ha advertido de que cualquier reforma requiere de una serie de requisitos, empezando por el procedimiento a seguir, que viene marcado en la propia Constitución, así como "definir con toda claridad el contenido, los principios que se quieren modificar y cuáles no se deben modificar".

EVITAR QUE SEA UNA CESIÓN A LOS SEPARATISTAS

Además, ha dejado claro que también tiene que evitarse que la reforma pueda ser "interpretada como una cesión ante las presiones separatistas" y sólo ser vista como "una actualización del pacto de convivencia" que representa la Constitución de 1978.

Tras la reforma de la Carta Magna, según Margallo, debe ir una "reforma del modelo productivo", y todo ello debe ser abordado por "aquellas fuerzas políticas que participen de los principios y valores que inspiran la democracia sin adjetivos, que asuman las obligaciones que implica nuestra pertenencia a la comunidad económica y monetaria".

"Si esos son los principios, la fórmula está clara y es la única que puede dar el paso siguiente", ha remarcado el ministro haciendo una referencia directa a la gran coalición que ha propuesto Rajoygran coalición entre PP, PSOE y Ciudadanos.

"Sólo una coalición con esa legitimidad, con ese apoyo parlamentario, puede hacer un llamamiento a la sociedad para que participe en ese esfuerzo de actualización de los pactos que nos dimos en el 78", ha explicado.