Los vecinos recelan de la mano dura prometida por Trias y siguen su protesta

 La mano dura prometida por el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, contra los apartamentos turísticos de la Barceloneta, donde en dos días se ha ordenado el cierre de 24 pisos ilegales, ha distendido los ánimos en el barrio, aunque los vecinos creen insuficientes esas medidas y mantienen sus protestas.

A las 22 horas de esta noche, los vecinos de la Barceloneta volverán a recorrer las calles del barrio en la quinta movilización que mantienen en las últimas semanas en protesta por la proliferación de alquileres ilegales y un modelo de turismo de masas que, aseguran, propicia las conductas incívicas en el espacio público.

Trias se reunió anoche con una decena de representantes de los vecinos y, según han explicado sus portavoces, se mostró totalmente comprensivo con sus reivindicaciones y dispuesto a aprobar medidas para atajar el fenómeno del llamado "turismo de borrachera".

En una entrevista en la emisora RAC 1, el alcalde ha afirmado este miércoles que "se les caerá el pelo" a los propietarios de pisos que "hagan tramas" y alquilen ilegalmente a turistas, y ha dado la razón a los vecinos, con los que ha garantizado que se reunirá una vez al mes para analizar la situación.

Además, el alcalde ha anunciado que en las primeras 24 horas de la campaña de inspecciones en el barrio, que se inició el pasado lunes, el Ayuntamiento ha ordenado el cese de actividad de 24 apartamentos turísticos ilegales, que se suman a otros 33 expedientes que ya están en curso.

Pese a que los vecinos valoran la mano tendida por el alcalde, en una reunión que aseguran transcurrió en un tono "cordial", creen que las medidas prometidas no son suficientes y exigen "hechos concretos" para solucionar una situación que este verano afirman ha rozado límites insostenibles.

De hecho, según los portavoces, hay algunos puntos en que las posturas entre el consistorio y los residentes de la Barceloneta están muy distanciadas, como la abolición de todos los apartamentos turísticos -ilegales o no-, un punto en el que el Ayuntamiento asegura carece de margen legal para actuar.

Los vecinos también reclamaron sin éxito a Trias la retirada del Plan de Usos de Ciutat Vella, una normativa que afirman elimina los límites a la creación de apartamentos turísticos, aunque el gobierno municipal se ha mostrado favorable a modificar algunos de sus planteamientos, han añadidos las mismas fuentes.

Por ese motivo, pese a admitir que los ánimos están "menos caldeados" en el barrio, los vecinos vuelven a salir esta noche a las calles contra el turismo de masas y lo harán de nuevo el próximo sábado, en la manifestación que ha convocado la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB) contra el modelo turístico de Barcelona.

La FAVB ha hecho un llamamiento a participar en la marcha a vecinos de todos los barrios, ya que considera que la problemática de la Barceloneta derivada del turismo de masas no es exclusiva de esta zona de la capital catalana, sino que puede hacerse extensiva a otros puntos de la ciudad que también soportan la presión turística

. En la misma línea, el presidente del grupo municipal de ICV-EUiA, Ricard Gomà, ha reprochado a Trias que esté promoviendo un "modelo de burbuja turística, masificado, con barra libre hotelera, especulación y sobreexplotación del espacio público".

El concejal ecosocialista ha pedido al alcalde que dé "una respuesta concreta y eficaz" a los vecinos de la Barceloneta, para "acabar con las presiones especulativas y destinar el alojamiento turístico a resolver las necesidades sociales de vivienda" en el barrio.