Un herido por el impacto de una pelota de goma en Barcelona
Las pelotas de goma han vuelto a Catalunya años después de su prohibición. Los Mossos d'Esquadra dejaron de utilizar esta munición en abril del 2014, tras resultar heridas una decena de personas y comprobarse que estos proyectiles podían causar heridas importantes, en especial cuando impactan en una zona sensible del cuerpo como es el ojo. Pero este domingo la Policía Nacional volvió a emplearlas para dispersar a los ciudadanos que se congregaron en la puerta de los colegios electorales designados para celebrar el referéndum.
Un hombre resultó herido en el ojo en una de estas acciones de los antidisturbios. Le ha impactado una pelota de goma cuando estaba en la calle Sardenya, entre Gran Via y Diputació, e intentaba alejarse del tumulto que se había ocasionado a raíz de la intervención policial en las puertas de la escuela Ramon Llull. Los antidisturbios actuaron y dispararon proyectiles cuando, tras requisar las urnas del centro educativo, se disponían a llevárselas y quedaron atrapados entre los manifestantes. Eran las 10.30 horas de la mañana. En medio de una gran tensión, los agentes dispararon sus escopetas de pelotas de goma, en trayectorias bombeadas, para mantener una línea de seguridad y poder abrir el paso a las furgonetas. Una de ellas impactó en un hombre que fue trasladado al Hospital de Sant Pau. En el centro sanitario ha sido operado.
La Policía Nacional no solo utilizó pelotas de goma en esta zona, sino, al parecer, en otros lugares de la capital catalana, como demuestran los proyectiles recogidos del suelo por algunos ciudadanos. Siempre en acciones de la Policía Nacional digiridas a dispersar a los ciudadanos que intentaban votar o protegían los colegios electorales, las urnas y las papeletas. Y no en Barcelona, sino también en otras poblaciones catalanas, como Sabadell. En esta última población el disparo de estos proyectiles se efectuó en las inmediaciones del colegio Nostra Llar.
La pelotas de goma están prohibida en Catalunya desde abril del 2014, tras provocar una decena de heridos graves, especialmente mutilaciones oculares. Esta está medida solo afecta a los Mossos d’Esquadra, que dependen de la Generalitat, y no a la Policía Nacional y Guardia Civil.
La polémica sobre estos proyectiles se desató cuando Ester Quintana perdió un ojo en la huelga del 14-N del 2012 por el impacto de un proyectil policial que, según ella y el juez que investigó el suceso, era una pelota de goma. El pleno del Parlament aprobó en diciembre del 2013 prohibir el uso de las pelotas a partir del 30 de abril del año siguiente. Desde entonces, la policía autonómica no las usa.
Polémica política y judicial
El 'caso Quintana' fue significativo porque la Conselleria d'Interior mantuvo durante meses que ese día autorizara el uso de las pelotas de goma. Al final, un juez logró sentar en el banquillo de los acusados a un mosso y un agente escopetero. La Audiencia de Barcelona les absolvió. La sentencia deja claro que la policía autonómica dejó tuerta a Quintana, que fue indemnizada por la Generalitat, pero, según el tribunal, “resulta imposible determinar” qué agente disparó ni qué munición se utilizó, una pelota de goma o una bala viscolástica (foam).
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