Junts pel Sí designa a Turull y Rovira coordinadores provisionales

Con sensación de provisionalidad y la boca cerrada. Así viven los diputados de Junts pel Sí el compás de espera antes de la constitución del Parlament y del Govern, si es que se llega a un acuerdo con la CUP. Ayer, la nueva reunión del grupo parlamentario en el que comparten espacio diputados de CDC, ERC, MES y Demòcrates de Catalunya, así como los independientes, se acordó designar como coordinadores provisionales del bloque de 62 diputados al convergente Jordi Turull y la republicana Marta Rovira. Sobre decisiones más de fondo, como la presidencia y la composición de la Mesa del Parlament, ni una palabra.

El propio president en funciones, Artur Mas, hizo el gesto de no hablar cuando le preguntaron sobre el estado de las negociaciones. «Muts i a la gàbia», se limitó a decir con una sonrisa antes de entrar en su despacho del Parlament.

Respecto al contenido de las conversaciones con la CUP, siguió sin trascender nada en absoluto. Raül Romeva se limitó a comentar que las negocaciones «avanzan» al «ritmo adecuado» dada la trascendencia de lo que está sobre la mesa: la investidura de un president, un pacto de gobernabilidad y la hoja de ruta hacia la independencia.

Al respecto de esta situación de incertidumbre, el conseller de Empresa i Ocupació en funciones, Felip Puig, mostró su optimismo sobre el proceso soberanista, que, según él, «seguirá adelante» pase lo que pase en las conversaciones entre Junts pel Sí y la CUP; incluso, dijo, aunque se tuvieran que celebrar unas nuevas elecciones. «Pase lo que pase en esta negociación, aunque tengamos que ir a otras elecciones, el proceso continúa», dijo Puig en RAC-1. Su imagen fue una de las que aparecieron en el mitin central de la CUP en varios naipes que simbolizaban a sus principales adversarios, junto a, entre otros, el conseller de Salut en funciones, Boi Ruiz; la cancillera alemana, Angela Merkel, y el exministro de Educación José Ignacio Wert.

Mientras esto sucede, siguen pendientes cuestiones como la materialización del pacto entre CDC y ERC para repartirse las conselleries del Govern y los puestos clave en el Parlament. Pero ello está también condicionado a las conversaciones con la fuerza anticapitalista.

En cualquier caso, la reunión de ayer transcurrió en un ambiente cordial. Uno de los diputados de CDC que ya conoce el funcionamiento de la Cámara bromeaba diciendo que se trataba de unas primeras lecciones o clases a los novatos para que se familiaricen con la institución.

Mientras, el Parlament también era el escenario ayer de discretas operaciones salida. El exconseller de Agricultura y dirigente de Unió Josep Maria Pelegrí y la candidata de Catalunya Sí que es Pot y dirigente de ICV Sara Vila, por ejemplo, empaquetaron sus objetos personales, dado que no seguirán en el hemiciclo. Las fechas de la constitución del Parlament y de la investidura siguen, por supuesto, en el aire.