El juez Castro vería "atípico" que el fiscal diseñara la defensa de la infanta

El juez José Castro consideraría "atípico" que, de ser cierto, el fiscal Anticorrupción Pedro Horrach hubiera participado en el diseño de la estrategia de defensa de la infanta Cristina, imputada en el 'caso Nóos', como apunta la revista 'Interviú'. Horrach ha negado ser autor del informe que difunde la revista, según el cual él propuso convencer a los abogados de Cristina de Borbón de que "la opción más inteligente" era la de no recurrir el auto de imputación y comparecer a la mayor brevedad posible ante el magistrado, así como trasladar a la Casa del Rey la conveniencia de asistir al proceso en silencio, evitando todo pronunciamiento para no "sulfurar" a la opinión pública.

De momento, el juez Castro mantiene la imputación de la infanta Cristina, tras su declaración del pasado 8 de febrero. Al magistrado no le convencieron las explicaciones de la hija del Rey que respondió con evasivas y recurrió al "no sé", "no me consta", "lo desconozco" en múltiples ocasiones. Tampoco quedó satisfecho con las explicaciones de los inspectores de Hacienda, que exoneraron a la infanta de las responsabilidades de los delitos fiscales cometidos por Aizoon, la sociedad que comparte con su marido al 50% y que forma parte del entramado Nóos.

El juez no ha decidido aún sobre la imputación

Mientras el fisco concentra toda la responsabilidad en el duque de Palma, Iñaki Urdangarin, el juez considera que deben compartirla los dos miembros de la pareja como copartícipes de la "sociedad fantasma". En definitiva, el magistrado sostiene que sin la empresa Aizoon y el apoyo de Cristina a crearla junto a su marido, no hubiera habido delito. No obstante, Castro todavía no ha tomado la decisión final sobre si la mantendrá o no imputada en su auto final, el de transformación a procedimiento abreviado que da por finalizada la instrucción. En el caso de mantener a la infanta como imputada, cabría recurso ante la Audiencia Provincial de Palma, que de nuevo, tendría la última palabra.

Entre tanto, la Fiscalía trata de cerrar su escrito de acusación, donde no estará la infanta y con toda probabilidad saltarán de la lista de imputados, el secretario de Cristina y de su hermana, Carlos García Revenga, y Ana María Tejeiro, la esposa del exsocio de Urdangarin, Diego Torres.

Los exsocios

Respecto la Urdangarin y Torres, Horrach se plantea un escenario con una amplia orquilla de petición de penas por los delitos de malversación (de 4 a 8 años), delitos fiscales (de 2 a 8 para Urdangarin y de 1 a 4 para Torres), fraude a la administración (de 1 a 3 años), prevaricación (solo inhabilitación por no ser funcionarios), falsedad documental (sería en concurso medial con la malversación, que prevalecería) y, tal vez, blanqueo (de 6 meses a 6 años).

La defensa de los dos exsocios ha mantenido hasta fechas recientes contactos con la Fiscalía para llegar a un pacto, que no ha llegado a fructificar. El ministerio público exige que, además del reconocimiento de la culpa y la devolución de los 6 millones de euros presuntamente malversados a través de Nóos, ambos asuman penas que impliquen ingreso en prisión, es decir que supere los dos años. Este último extremo ha impedido el acuerdo, que sigue buscándose hasta el último minuto. Con una opinión pública indignada ante la corrupción, más si la cometen prsonas con la vida resuelta, Horrach se enfrenta a la difícil tarea de señalar las penas en su escrito, dejando un margen para la rebaja en caso de un acuerdo que no caliente más los ánimos de la ciudadanía.