El órdago por el Estado propio

Interior vincula a la izquierda aberzale con la Via Catalana

Ensayo de la cadena humana celebrado ayer por las calles del barrio de Sants.

Ensayo de la cadena humana celebrado ayer por las calles del barrio de Sants.

RAFAEL TAPOUNET
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pese a que han transcurrido ya 22 meses desde que ETA anunció el cese definitivo de su actividad armada y a que el Tribunal Constitucional ha avalado la legalidad de Sortu, el partido político de referencia de la izquierda aberzale, los responsables de la lucha antiterrorista siguen sometiendo a un escrutinio exhaustivo todas y cada una de las iniciativas surgidas desde el ámbito del independentismo vasco, sobre las que elaboran informes que hacen llegar regularmente a la cúpula del Ministerio del Interior. Uno de estos informes, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, advierte de la existencia de vínculos entre la izquierda aberzale y la organización de la Via Catalana, la cadena humana por la independencia que recorrerá Catalunya desde La Jonquera a Alcanar con motivo del Onze de Setembre.

La observación de carácter preventivo se recoge en un documento policial que da cuenta de las actividades de la campañaGure esku dago(Está en nuestras manos), una iniciativa promovida por la izquierda aberzale para extender por el País Vasco y Navarra la reivindicación del derecho de autodeterminación «como un derecho fundamental». El informe pone un especial énfasis en apuntar que los impulsores de esa «dinámica ciudadana» mantienen «especiales relaciones con organizaciones a favor del derecho a decidir» de Catalunya y Escocia y «están impulsando una serie de actos en dichos territorios». En este sentido, destaca la «participación [de representantes de la citada plataforma vasca] en la cadena humana por el derecho a decidir que se va a realizar el 11 de septiembre en la capital catalana con motivo de la Diada».

La utilización de las advertencias policiales sobre la presencia de elementos de la izquierda aberzale como factor de posible deslegitimación de las movilizaciones populares no es una práctica nueva del Ministerio del Interior. Ya se empleó, por ejemplo, durante el periodo de máxima efervescencia del movimiento 15-M. En esta ocasión, además de alertar de la participación de activistas procedentes de Euskadi en la Via Catalana, el documento de Interior subraya que las acciones que planeaGure esku dago«guardan cierto paralelismo con las iniciativas que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) está realizando para fomentar el derecho a decidir».

LA 'VÍA VASCA'/ Precisamente, uno de los proyectos que tiene en cartera la plataforma independentista vasca es la organización de una cadena humana de 130 kilómetros entre la localidad vizcaína de Durango y Pamplona. El acto, convocado para el 8 de junio del próximo año, pretende reunir a 50.000 personas. El informe policial destaca que el coordinador de la iniciativa es el dirigente de Sortu «y exmiembro de la Mesa Nacional de Batasuna» Ibon Arbulo.

El documento relata asimismo que uno de los objetivos deGure esku dagopara el curso político que ahora se inicia es «consolidar sus relaciones» con organizaciones independentistas catalanas y crear en Catalunya «un grupo de apoyo» a sus propias iniciativas. También se hace constar que el presidente del Consell Assessor per a la Transició Nacional, Carles Viver Pi-Sunyer, participará el 7 de noviembre, junto con el exlendakari Juan José Ibarretxe y la magistrada del Tribunal Constitucional Adela Asúa, en una conferencia organizada en Vizcaya por la citada plataforma para «recabar apoyos».

Según el informe que maneja Interior,Gure esku dagotenía serios «problemas económicos» para financiar sus actividades pero ha hallado una importante «fuente de financiación» en las subvenciones de la Diputación de Guipúzcoa, gobernada por EH Bildu.

TRANQUILIDAD / El interés que han puesto los responsables de la lucha antiterrorista en rastrear las posibles conexiones entre la Via Catalana y la izquierda aberzale contrasta con la percepción expresada ayer por fuentes próximas a la presidencia del Gobierno central, que dijeron estar tranquilas porque hasta la fecha han detectado «mucho menos ambiente de movilización» que en los días previos a la manifestación del 2012. El Onze de Setembre pondrá a prueba su capacidad para anticipar los hechos.