Inés Arrimadas, Miquel Iceta y Xavier García Albiol llevan hoy juntos al TC el pleno de la ruptura

Inés Arrimadas, Miquel Iceta y Xavier García Albiol han quedado este miércoles a las 12.30 horas en la sede del Tribunal Constitucional (TC) en Madrid para, como diría el jefe de filas del PPC en el Parlament, plantar cara ante el pleno de ruptura impulsado por Junts pel Sí y la CUP. Los líderes de los tres partidos constitucionalistas se han coordinado para intentar frenar la celebración del pleno en el que Junts pel Sí y la CUP quieren aprobar una resolución a favor de iniciar la desconexión con el resto de España. Cada uno presentará por separado un recurso de amparo en el que se alegará la "ilegalidad" del texto soberanista y se aportará también como argumento que este martes se celebró una junta de portavoces para seguir tramitando el documento que "no es válida" porque los populares no están constituidos como grupo parlamentario. Todo pactado: no irán revueltos, pero sí saldrán juntos en la foto.

Esos recursos ante el TC ya estaban anunciados de antemano, como tampoco fue una sorpresa que la mayoría soberanista de Junts pel Sí en la Mesa del Parlament (cuatro diputados a tres) rechazara las peticiones de reconsideración del pleno y siguiera adelante: el plazo de enmiendas al documento independentista queda abierto hasta el viernes y será entonces cuando se ponga fecha definitiva al debate.

El Tribunal Constitucional, por su parte y según funetes de la institución, podría abordar esta misma semana los recursos que presenta la oposición contra la decisión de la Mesa del Parlament de admitir a trámite la resolusción de ruptura de Junts pel Sí y la CUP. A pesar de que no hay nada decido, los magistrados tienen la posibilidad de incluir sobre la marcha la cuestión en el pleno que comenzó el martes, y que puede alargarse hasta el viernes. La decisión se adoptará cuando los tres partidos registren el recurso. Si se aborda la cuestión esta semana, el TC podría emitir una decisión antes que se celebre el pleno.

Será muy probablemente el lunes por la mañana, antes del debate de investidura del 'president'; es decir, tal y como deseaban los soberanistas y tal y como insinuó ayer la presidenta de la Cámara, Carme Forcadell. Ella no fue tan rotunda como la republicana Marta Rovira, que acusó al PPC de hacer un "abuso del reglamento" por apurar "con mala fe" su constitución como grupo para intentar posponer la junta de portavoces, pero sí defendió que la Cámara "no ha hecho nada ilegal" y se ha respetado "el derecho de participación de todos los partidos".

DISCUSIÓN POR LOS PRECEDENTES

Forcadell alegó que los servicios jurídicos de la institución elaboraron un informe en el que se indica que existen "antecedentes" de juntas de portavoces celebradas pese a que algunos grupos no estaban formalizados oficialmente. La oposición -incluida Catalunya Sí que es Pot, que también consideró inválida esa reunión- rebatió esa información y tanto el diputado del PPC Enric Millo como el propio Albiol exhibieron ante la prensa documentos a su favor: en el 2006 y el 2010 no se celebraron juntas de portavoces antes de que estuvieran constituidos los grupos parlamentarios. Hubo reuniones, pero según aseguraron los populares esos encuentros se consideraron "reuniones de representantes" y las primeras actas oficiales de juntas datan de días posteriores, con todos formalizados oficialmente.

"¿Por qué estas urgencias en celebrar el pleno si no es porque se están defendiendo los intereses de los Pujol y de Artur Mas, envueltos con problemas con la justicia?", se despachó el portavoz de Ciutadans, Carlos Carrizosa, recurriendo a su habitual estrategia de relacionar la corrupción con el debate soberanista.

Iceta no entró en ese charco. Es más, intentó justificar por qué suma fuerzas con el PPC y Ciutadans. "Siempre hemos dicho que la política catalana no puede dividirse en frentes y lo mantenemos, pero presentaremos el recurso en defensa de que las instituciones se mantengan en el marco de la ley", adujo. A renglón seguido, sin embargo, admitió que este tiene pocas probabilidades de prosperar y anunció que el PSC irá a la votación si el pleno se celebra.

ROVIRA Y LA JURISPRUDENCIA

Junts pel Sí y la CUP, por supuesto, dieron por hecho que así será, y Rovira se apoyó en dictámenes del mismo TC para razonar que la sesión cumple con la ley para poder llevarse a cabo. Después, eso sí, matizó que podía ser tanto el TC de España "como el de Alemania". La cupera Anna Gabriel añadió otro enfoque al denunciar que muchos ataques a Forcadell son por "misoginia" y "clasismo". "Si hubiera sido un hombre de clase alta de Barcelona no lo hubieran tratado así",  remató.