Mirador

Hasta el cuello

XAVIER BRU DE SALA

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Mientras la ciudadanía está hasta la coronilla de la corrupción, el Gobierno deMarianoRajoyestá hasta el cuello. Si sube un poco más el nivel de las aguas fecales del sistema, por un lado estallará la indignación y por el otro sumergirá al Gobierno. Cuando ya sufríamos graves inundaciones por la multiplicación de los casos y los afectados, cuando más a flor de piel se encuentra la sensibilidad y la irritación social, se produce una descarga que eleva el nivel de las aguas sucias desde la rodilla al cuello. Una ola de enormes proporciones.

El PP se defiende negándolo todo, pero las informaciones aparecidas han dado la vuelta al mundo como perfectamente creíbles. El escándalo es monumental. Todos están pendientes de las reacciones. Un incremento de la crisis de confianza hacia los políticos y los grandes partidos que repercute en el agravamiento de la crisis económica. La marea del descrédito internacional de España y sus dirigentes iba al trote y ya va al galope. ¿Con qué rostro se pueden presentar a pedir ayuda a Europa y el FMI, si todo el mundo les ve como presuntos corruptos?

Desde un punto de vista de la moral pública, lo más grave es la falta de ambiente para la regeneración. El medio millón de firmas que piden la dimisión deRajoy, la cúpula del PP y todos los afectados son una buena señal, pero no es suficiente. Es de temer que será manipulado, si no es que muchos de los que han firmado se abstendrían de hacerlo en caso de que el partido afectado por revelaciones similares fuera el PSOE. En Madrid, los casos de corrupción son utilizados sobre todo como arma para abatir rivales políticos. Cañón de grueso calibre en manos del PSOE contra el PP, pero también torpedo de la extrema derecha a la línea de flotación deRajoy, al que acusan de centrista y moderado.

La corrupción del PSOE propició la llegada de José María Aznar al poder. La del PP de Rajoy puede propiciar, más que una disolución de las cámaras y unas elecciones anticipadas, la toma del poder por parte del otro PP, el deAznar yEsperanza Aguirre. La lucha interna en la derecha española es feroz. La derecha dura procura la muerte política deRajoyy él dedica sus energías, de las que no va nada sobrado, a sobrevivir en vez de gobernar. Al PSOE yRubalcabaya les va bien, porque si el PP se aleja del centro, ellos tienen más opciones de volver a ganar. La fortaleza que amparaRajoy, defendida por el altísimo muro de la mayoría absoluta, es atacada desde fuera por el PSOE y desde dentro por gente de su partido. El pronóstico es grave.

Una vez más, depende de los jueces que en España gobierne uno u otro. Las esperanzas del presidenteRajoyaumentarían si el caso pasara pronto al Tribunal Supremo, más amigo que la Audiencia Nacional. O quizás ni así.

Por el escándalo del estraperlo, en el 34, cayó el gobierno centrista. PorBárcenaspuede caerRajoy.