Rajoy y sus ministros se preparan para contrarrestar un debate "bronco"

Iglesias se arropa de los alcaldes del cambio en la moción de censura

Pablo Iglesias pasa ante Mariano Rajoy en la sesión constitutiva de la XI legislatura en el Congreso de los Diputados.

Pablo Iglesias pasa ante Mariano Rajoy en la sesión constitutiva de la XI legislatura en el Congreso de los Diputados. / periodico

PILAR SANTOS / IOLANDA MÁRMOL / MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los dos protagonistas de la moción de censura, Pablo Iglesias Mariano Rajoy, se encerraron este lunes en casa para preparar sus intervenciones en el Congreso. El líder de Podemos tomará la palabra para presentar su programa de Gobierno, con el que sabe que no podrá tumbar al dirigente del PP, que pese a estar en minoría parlamentaria y acechado por la corrupción ha ido tejiendo alianzas interesadas para su investidura, el techo de gasto y recientemente los Presupuestos. La muestra, dicen los conservadores, de que en el Congreso hay muchas mayorías, pero solo un jefe del Ejecutivo posible: Rajoy.  

El político gallego escuchará a Iglesias muy atento desde su escaño. Él y cualquier miembro de su Gobierno podrá intervenir cuando quiera y el tiempo que quiera. La Moncloa no ha querido desvelar su estrategia y asegura que todos están preparados para tomar la palabra y contrarrestar los envites de los podemitas. Rajoy este lunes ni siquiera convocó la reunión habitual en Génova y se quedó en su despacho estudiando. Esperan un debate "bronco" y con "golpes fuertes", comentó la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, en una entrevista en TVE. Ella lo sospecha porque Podemos quiere "recuperar el foco" y dice que ha encontrado en la moción de censura una herramienta para montar el "numerito". Frente al partido morado, Rajoy, Santamaría y todos los ministros van cargados de argumentos para "intentar poner las cosas en su sitio" y 'vender' la "estabilidad" y los datos económicos "históricos" que se prevén entre abril y junio.

LA CORRUPCIÓN

Fuentes del PP y del Ejecutivo temen el acierto que pueda tener Iglesias a la hora de plantear los escándalos de corrupción que afectan a la formación conservadora. En ocasiones el político de Vallecas se lo pone fácil a sus contricantes con las formas que emplea. La número dos del Gobierno comentó que el principal argumento que tienen es blandir los hechos: las "instituciones funcionan" porque aunque haya manzanas podridas el Estado "manda a la gente a la cárcel". 

MAESTRE EN LUGAR DE CARMENA

Pero Iglesias no solo preparó en su casa, acompañado por su número dos, Irene Montero, lo que dirá en la tribuna. También se preocupó de la 'escenografía', de transmitir una imagen de solvencia como presidenciable (aunque esté abocado al fracaso). El máximo dirigente de Podemos ha pedido a los alcaldes del cambio que le arropen durante el debate. Estarán presentes el alcalde accidental de Barcelona, Gerardo Pisarello, que sustituye a Ada Colau (aún recuperándose de su reciente maternidad); también asistirá desde la tribuna de invitados el edil de Cádiz, José María González 'Kichi', la alcaldesa de Badalona, Dolors Sabater, y los gallegos: Xulio Ferreiro (A Coruña), Martiño Noriega (Santiago) y Jorge Suárez (Ferrol). La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que siempre ha marcado distancias con Podemos, no irá. Sí ha confirmado su asistencia la portavoz del Ayuntamiento, Rita Maestre.