La extraña cita de Susana Díaz en Catalunya

Susana Díaz

Susana Díaz / EFE / RAMÓN DE LA ROCHA

XABI BARRENA / BARCELONA

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Susana Díaz, la presidenta de la Junta de Andalucía y ‘lideresa’ a la sombra del PSOE, desembarca este viernes en Barcelona en uno de esos actos difícilmente encajables en cualquier relato relacionado con los socialistas. Sean los de aquí (PSC) o los de allí (PSOE). Participa la andaluza en una mesa redonda sobre “regeneración democrática y nuevas formas de gobernar” en L’Hospitalet. Le acompañará el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig. Díaz y Puig mantienen, cada uno por su lado, un enfrentamiento con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Aunque en lo ideológico, el valenciano se alinea con la visión del líder socialista, que podría simbolizarse con la apuesta por el corredor mediterráneo. Primera pista, pues. ¿Será lo del viernes un aquelarre anti-Sánchez, en plena etapa precongresual?

También participarán en el acto la alcaldesa de Santa Coloma, Núria Parlón. Parlón, que apoyó a Eduardo Madina en el anterior cónclave del PSOE, forma parte del ‘Gobierno’ en la sombra que nombró Sánchez. La alcaldesa medita si, en el también próximo congreso del PSC, plantea batalla a Miquel Iceta. Y en lo ideológico, el pensamiento de Parlón se asemeja al de Diaz como un huevo a una castaña, por ejemplo, en cuanto a la resolución del conflicto catalán. Núria Marín, la alcaldesa de L’Hospitalet, cerrará el acto, por ser la edil de la ciudad anfitriona. Gente de su equipo ve con molestia el acto y no saben dar fe de quién lo ha organizado. La bienvenida a los ponentes correrá a cargo de Iceta que, en un primer momento, no había sido invitado por los organizadores. De lo que nacen dos preguntas: “¿Se trata de un aquelarre contra Iceta? Y sobre todo: ¿Quién demonios monta el acto?

SE BUSCA ORGANIZADOR

Una voz cercana a la dirección de la calle de Nicaragua (todavía) atribuye la organización a los “hijos de los ‘capitanes’”. Es decir, a la nueva generación de cargos del Baix Llobregat. “Quieren visibilidad para tomar posiciones cara al congreso del PSC”. Esta voz incluso atribuye el que Miquel Iceta no hubiere sido invitado, en una primera instancia, como “un error, una chapuza”, pero no un intento de hostigar al primer secretario del PSC.

Otra fuente también apunta al Baix Llobregat, pero no a los ‘cachorros’, sino al siempre activo José Zaragoza. En el Baix Llobregat, o en alguna de sus partes (ya nada es lo que era) existe descontento con Iceta. Reunir a Díaz, Puig y Parlón sería una forma de decir ‘no todos los socialistas catalanes están con Sánchez y con Iceta”.

MOTIVOS PARA LA DESAFECCIÓN

Los motivos del enfado son dos. El primero, que se convocaran primarias para elegir una nueva cabeza de lista para el Congreso, cara al 26-J. Eso forzó, creen algunos, la marcha de Carme Chacón. Y después que Iceta presentara una ponencia política cara, precisamente, al congreso del partido, sin pasarla por la ejecutiva. En esta ponencia se apuesta por la ‘vía canadiense’ si fracasa en Catalunya el eventual referéndum sobre la aun más eventual reforma constitucional que, algún día u otro, los socialistas dice que tienen toda la intención de hacer y que deberá contar con el apoyo del PP.