El exdirector de Trabajo de la Junta sale de prisión sin fianza

Francisco Javier Guerrero, el exdirector de Trabajo de la Junta de Andalucía considerado principal implicado en la trama de los ERE fraudulentos, ha abandonado este miércoles la prisión de Sevilla donde permanecía encarcelado desde finales del pasado mes de marzo. La jueza instructora Mercedes Alaya adoptó esta decisión por sorpresa y con el argumento de que al no estar ya la causa bajo secreto sumarial la prisión preventiva o provisional no tiene sentido.

Guerrero fue encarcelado el pasado 20 de marzo tras prestar una maratoniana jornada de declaración ante la jueza Alaya en el marco de la operación Heracles, que se saldó con 22 detenidos, siete de los cuales acabaron en la cárcel. Al contrario que en la primera vez que Guerrero ingresó en prisión, cuando tuvo que abonar 50.000 euros, esta vez la juez no ha impuesto fianza alguna, según confirmaron fuentes judiciales.

El letrado del exdirector de Trabajo ya había recurrido en su momento el encarcelamiento, al entender que si la causa estaba bajo secreto de sumario "no puede afirmarse que el imputado pueda obstaculizar las diligencias de investigación". El abogado destacaba sin embargo este miércoles que si bien la prisión se había ordenado para evitar la destrucción de pruebas o que el acusado pudiera influir en otros implicados, en el patio de la cárcel había coincidido durante todo este tiempo precisamente con el considerado otro cabecilla de la trama, el exsindicalista y 'conseguidor' Juan Lanzas, con lo que se vulneraba uno de las argumentos para mantenerlo encarcelado.

240.000 en dádivas

En el auto que dictó entonces, Alaya señalaba a Guerrero como el epicentro de una trama que había convertido las ayudas a empresas en crisis en "un verdadero negocio". Y hacia hincapié en que recibió dádivas de las empresas consultoras a las que encargó, sin concurso público, la tramitación de las prejubilaciones. Las investigaciones de la Guardia Civil apuntaron que este beneficio pudo superar los 240.000 euros en transferencias.

Junto a Guerrero, también Lanzas podría abandonar la cárcel en las próximas horas, dado que la Audiencia Provincial de Sevilla acordó el pasado martes su puesta en libertad bajo fianza de 450.000 euros. Aunque en las diligencias policiales apuntan a que el exsindicalista pudo haber acumulado una fortuna de 8,6 millones de euros en sobrecomisiones procedente de las mediadoras, y que en el momento de los registros sus familiares se jactaron de la importante cantidad de dinero que poseía, fuentes de su defensa ya han anunciado las dificultades para reunir la fianza.