La estrategia de los republicanos

La dirección de Esquerra aboga por avanzar a julio el congreso

La ejecutiva quiere que el cónclave sirva para rearmar el partido antes del 27-S

Los miembros de la ejecutiva surgida del último congreso de ERC, en octubre del 2011.

Los miembros de la ejecutiva surgida del último congreso de ERC, en octubre del 2011.

XABIER BARRENA
BARCELONA

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En un año con tres convocatorias electorales, dos ellas en el último cuarto del año, encajar un congreso de partido no es tarea fácil. Así lo están viviendo en sus carnes en ERC. En otoño se cumple el mandato del anterior cónclave, de octubre del 2011, en el que fue elegido Oriol Junqueras, y, por tanto, es entonces cuando se debería celebrar el congreso. Los estatutos dan un margen de tres meses, antes y después, para que se lleve a cabo y, ante el poco espacio libre que queda entre septiembre y enero, la ejecutiva aprobó el pasado lunes plantear al consejo nacional ( que se reunirá el próximo día 21) la celebración del congreso en el mes de julio. Salvo sorpresa mayúscula, el máximo órgano entre congresos dará su visto bueno y el cónclave se celebrará, posiblemente, el fin de semana del 25 de julio.

La celebración de las elecciones al Parlament, el 27 de septiembre, y la de las generales, aún sin fecha pero a discurrir entre octubre y noviembre, presumiblemente, dejan poco espacio de maniobra. Además, las elecciones municipales del 24 de mayo completan el ciclo electoral iniciado con los comicios al Congreso de noviembre del 2011. «Es un buen momento para el 27º congreso», señala una fuente.

«Hay que armarse para el otoño - asevera esta misma fuente, pensando, obviamente, en el 27-S-, llegar a las elecciones con la maquinaria a punto». Y no lo dice, pero se le entiende, que el cierre de filas absoluto alrededor de Junqueras es un engranaje clave de esa maquinaria. Tampoco sorprende. Con el también alcalde de Sant Vicenç dels Horts ha llegado la primera victoria electoral en 80 años (en las europeas de mayo del 2014) y los peores sondeos para el 27-S auguran una cifra de diputados récord desde 1980. «En otoño pasarán muchas cosas, en el plano de la política catalana, y no nos podemos distraer en el debate interno», sentencia esta fuente.

Si el consejo nacional da luz verde al adelanto congresual, tras las municipales se iniciará el proceso participativo que, a lo largo de los meses de junio y julio, permitirá la elaboración de las ponencias. Habida cuenta de que el 27º congreso se celebrará a 64 días de las más trascendentales elecciones catalanas, se auguran pocos cambios significativos en la cúpula. El tándem Junqueras-Marta Rovira (secretaria general) parece intocable. El secretario de organización, Isaac Peraire , fue elegido en el cargo, justamente, el 27 de septiembre, pero del 2014. Es decir, no lleva ni un año en el cargo.

En cuanto a las líneas directrices, la posibilidad de una independencia catalana, algo que el partido defiende desde hace lustros, se conjugará con la voluntad expresada por Junqueras de convertir ERC en un partido hegemónico en el centro-izquierda. Eso significa abrirse no solo a otros espacios políticos, sino también sociales.