Radiografía del grupo socialista en el Congreso

Muchas miradas, las de quienes aún no se han cansado de tantos meses de política en funciones, apuntan estos días a los 84 diputados del grupo parlamentario socialista, del que se ha restado ya al representante de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, quien pese a estar en el grupo mixto cerró una coalición electoral con el PSOE para los comicios del 20-D y el 26-J. Descontado el apoyo del PP y de Ciudadanos, que da por bueno el acuerdo anterior como si el ‘caso Soria’ o el juicio de la ‘Gürtel’ no hubieran pasado, serán esos 84 parlamentarios los que tendrán en sus manos facilitar o no la investidura de Mariano Rajoy tras un comité federal en que se impuso una abstención que no todos están dispuestos a acatar.

84 diputados. 49 hombres y 35 mujeres (las listas cremallera no garantizan la paridad si el número 1 de la candidatura acostumbra a ser varón) procedentes de 49 demarcaciones. Solo Lleida, Ceuta y Melilla se quedaron sin representación socialista en las últimas elecciones. A partir de ahí, la distribución por comunidades autónomas da a los parlamentarios andaluces un poder similar al que atesoraron en el cónclave del partido del pasado fin de semana. Entonces, el PSOE-A representaba el 25% del total. En la Cámara baja, cerca del 24% de los diputados socialistas, una veintena, son suyos. Quienes más se les acercan son los nueve de Castilla y León, mientras que el tercer puesto lo ostentan, empatados, los castellano manchegos, los catalanes y los madrileños, con siete cada uno. Con esos mimbres, la abstención en favor del actual presidente en funciones está asegurada, pues bastaría con el voto de los parlamentarios de la federación que lidera Susana Díaz para ratificarla.

Además de Pedro Sánchez, entre las caras más conocidas de los socialistas se encuentran su rival (en las primarias y después) Eduardo Madina, el elxalcalde de San Sebastián Odón Elorza, la magistrada Margarita Robles, la militar Zaida Cantera, el dirigente del PSOE madrileño y víctima del ‘Tamayazo’ Rafael Simancas, y expresidentes autonómicos como Patxi López, José María Barreda y Antonio Trevín. De todos, sin embargo, es el valenciano Ciprià Císcar el que lidera la clasificación de veteranos en la Cámara baja: ocupó un escaño en la cuarta legislatura (1989-1993) y solo lo perdió del 2011 al 2015. En el 2016 tampoco lo consiguió, pero la renuncia de María Such le permitió volver al Congreso.

EL VETERANO CÍSCAR

En el caso opuesto a Císcar cabe reseñar que 40 diputados debutaron con Sánchez como candidato socialista a la Moncloa: 34 lo hicieron en las elecciones del 20-D y seis se estrenaron en los comicios de junio. Es por tanto un grupo parlamentario bastante renovado, pues otros 20 representantes llevan desde el 2011 y son testimoniales quienes tuvieron a José Luis Rodríguez Zapatero como jefe de filas. Ese cambio de caras implica un rejuvenecimiento respecto de otras legislaturas, aunque la edad media se sitúa en torno a los 50 años. El más joven es el aragonés Gonzalo Palacín. El más viejo, el valenciano Císcar (69).

Como en el resto de partidos, a la hora de hablar de los estudios de los parlamentarios socialistas sobresalen los licenciados en Derecho. 27 en total. Es la profesión predominante en todas las fuerzas políticas. Le siguen los economistas y los maestros y profesores y, también como en los demás grupos, hay quienes no cuentan como estudios superiores. En este caso, el catalán José Zaragoza y la madrileña Ángeles Álvarez son dos ejemplos.