La concesión del aeropuerto murciano provoca una crisis en el Gobierno autonómico

Las discrepancias en el Gobierno murciano por las negociaciones para la apertura del aeropuerto ha provocado una crisis en el Ejecutivo regional que se ha saldado con la dimisión del consejero de Obras Públicas, Manuel Campos. Este ha tomado la decisión tras una reunión en Madrid con la ministra de Fomento, Ana Pastor, en la que el presidente autonómico, Alberto Garre, propuso sacar a concurso público la concesión del aeropuerto, suspender las negociaciones con la empresa Aeromur y que Aena se presentara y se hiciera cargo de la deuda. Con esta situación se pospone de nuevo la apertura del aeropuerto cuya adjudicación, según Garre, "ha traído muchísimos problemas", aunque no contempla un futuro sin aeropuerto en Murcia. "Aeropuerto va a haber", ha dicho.

El presidente murciano ha añadido que Campos se ha sentido desbordado por las negativas de Sacyr porque no ha encontrado respuestas de la empresa, que se ha cerrado en banda en las negociaciones. "Ha dicho a todo que no", ha afirmado. Sacyr no quería asumir los compromisos de la deuda de 200 millones de euros para pagar el aeropuerto, garantizar 160 millones de euros para paliar las pérdidas en los primeros años de la instalación y contar con los 80 trabajadores del aeropuerto de San Javier. "El dinero es de todos los murcianos y entre ellos parados, mileuristas y familias que lo están pasando mal, por lo que no se puede admitir de ninguna manera que esa deuda no la garantice nadie", ha afirmado Garre.

Las obras del aeropuerto comenzaron en julio del 2008 y su inauguración estaba prevista para el 2010. Tras varias demoras, se acabó hace dos años. Sin embargo la empresa concesionaria Aeromur, cuyo principal accionista es Sacyr, no pudo ponerlo en marcha por problemas económicos y aludiendo a que la situación económica actual no es la que había cuando comenzó la construcción en el 2008.

CRÉDITO CON AVAL

La ejecución de las obras ha supuesto una inversión de 250 millones de euros. Los socios de Aeromur aportaron 50 millones, que se destinaron a pagar los movimientos de tierras y la estructura de la terminal. Posteriormente, recurrió a un crédito de 200 millones que no consiguió hasta que la comunidad autónoma le avaló ante las entidades financieras.

En septiembre del 2013, el Gobierno regional rescindió el contrato para la explotación del aeropuerto a Aeromur por la demora en el cumplimiento de los plazos establecidos para poner el aeropuerto en marcha así como por "la renuncia unilateral a la ejecución del contrato, todo ello imputable a la empresa concesionaria", ha dicho.

Actualmente, el Gobierno murciano y Aeromur habían retomado el contacto y se había paralizado el proyecto de un nuevo concurso, mientras el Gobierno regional se ha hecho cargo del pago del aval de 200 millones de euros, que paga actualmente. La fecha probable de apertura podría ser abril. "Nos gustaría abrir Corvera, pero no estoy aquí por intereses electorales", ha zanjado Garre.