La CUP y la monja Forcades negocian un pacto electoral

La CUP y Procés Constituent están negociando concurrir unidos a las próximas elecciones al Parlament. Así lo explicó ayer el diputado de la fuerza independentista David Fernàndez  en declaraciones a Catalunya Ràdio. Sin embargo, el anuncio del parlamentario de la CUP provocó algo de confusión, pues con sus palabras pareció dar por hecho el pacto. Aseguró que su fuerza está «obligada» a llegar a un acuerdo con Procés Constituent para presentarse juntos a los comicios, e incluso dio un nombre de candidatura, Crida Constituent. Tras esa afirmación, Procés Constituent emitió un comunicado para aclarar que «lleva más de un año debatiendo con diversas fuerzas políticas y sociales de la izquierda» y que las conversaciones están abiertas.

«Con los compañeros queridísimos de Procés Constituent ya no es que estemos obligados, es que hace mucho tiempo que estamos de acuerdo en muchas cosas», apuntó Fernàndez en los micrófonos de la radio pública. Incluso señaló que, en este momento de «excepcionalidad», la CUP está dispuesta a renunciar a sus siglas porque es necesario que «la izquierda radical anticapitalista sume por la plena libertad del país». Fernàndez, que no se volverá a presentar, apostó por trabajar desde «la izquierda radical por el sí-sí».

Poco después, el partido de Arcadi Oliveres y la monja Teresa Forcades matizó en una nota que está dialogando «de forma permanente» con la CUP, de igual forma que lo hace con otras fuerzas como ICV-EUiA y Podem. «Durante este periodo de trabajo y diálogo se han producido avances y se han acercado posturas en diversos temas», apuntó.

ASAMBLEA GENERAL / Aun así, y dejando claro que se esforzará por «hacer posible una candidatura unitaria y plural» contraria a los recortes y a favor de «un proceso constituyente y democrático» sobre el futuro de Catalunya, Procés Constituent puntualizó que esta fase de debate «externo e interno» culminará en una asamblea general extraordinaria en la que se decidirá «de manera colectiva» la estrategia de cara a unas posibles elecciones anticipadas al Parlament. En definitiva, que el debate «continúa vivo» y no se da por cerrado ningún acuerdo.

Posteriormente, la CUP atribuyó en su cuenta de Twitter la información sobre el acuerdo, que calificó solo de «deseo», a una interpretación de los medios de comunicación: «Máximo respecto al debate de las asambleas del Procés Constituent. Algunos medios han interpretado el «deseo» como un hecho». En un comunicado emitido después, la fuerza explicó que el pacto electoral todavía no está cerrado y que siguen trabajando en la perspectiva de aglutinar un espacio «con diferentes organizaciones independentistas, anticapitalistas, ecologistas y del municipalismo catalán». Finalmente, la CUP emplazó al próximo 10 de enero, cuando harán pública su posición definitiva.