La CUP, satisfecha por que Mas supere el autonomismo pero echa en falta autocrítica

El diputado de la CUP Albert Botran ha sido el encargado de poner voz a la valoración que la fuerza anticapitalista ha hecho del <strong>discu</strong><strong>rso</strong> de Artur Mas. Por un lado se ha felicitado de que el líder convergente haya dado por superada la etapa del autonomismo mientras que por contra se ha mostrado muy crítico por la "ausencia clamorosa e injustificada" de referencias a la corrupción. Hay que tener en cuenta que la CUP ha hecho siempre bandera de la necesidad de luchar contra esta lacra.

Para la CUP es bueno que Mas haya apuntado algunas de las medidas sociales que van en la línea del <strong>anexo</strong> que esta fuerza y Junts pel Sí incluyeron en la declaración soberanista pero también han lamentado que el president en funciones no haya renegado más de los recortes, de los que hacia gala en su primer mandato.

Por la mañana, la diputada de la CUP Anna Gabriel cargó no solo contra el Estado español sino contra las desigualdades "fruto de políticas de los distintos gobiernos, también desde la Generalitat". La representante de la CUP exigió que se implante la <strong>resolución</strong> aprobada hoy "sea cual sea el conflicto que comporte con el Estado, proclamamos nuestra insubordinación democrática".

Gabriel  finalizó con una defensa del "republicanismo", de la "ética basada en la decencia". Y con un "salut i república" que mereció los aplausos de la CUP y de diputados de Junts pel Sí. En cambio, los miembros del Govern, con  Mas a la cabeza, no la aplaudieron.