EL CONFLICTO VASCO

Urkullu: "ETA nunca debió existir"

El presidente del PNV reitera en su intervención en la Conferencia Internacional de Paz de Euskadi que es tiempo de arriesgar

Gerry Adams, a su llegada a la conferencia.

Gerry Adams, a su llegada a la conferencia. / AB JW**LON**

MAYKA NAVARRO / San Sebastián

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El presidente delPNV, Iñigo Urkullu, ha reiterado en su intervención en laConferencia Internacional de Paz de Euskadi que es tiempo de arriesgar nuevamente y que "ETA nunca debió existir". El nacionalista ha aprovechado los dos minutos que tenía cada uno de los invitados al cónclave.

Ni uno de los párrafos ha sido papel mojado. "Paz por paz. Sin contrapartidas políticas de ningún tipo. No somos ingenuos. Sabemos que la paz tiene un precio, o muchos precios. Que genera intereses contrapuestos. Nuestra mirada no está puesta en los réditos o en los costes particulares que acompañen el fin de la violencia. Nuestro interés es el bien supremo de la paz. Estamos dispuestos a aplicar la altura de miras y la generosidad que este bien supremo nos demanda", ha manifestado el dirigente nacionalista.

Urkullu ha aprovechado para recordar que, como en Irlanda, se necesitarán fondos económicos para edificar esa paz. Por eso ha pedido en su intervención "un planPEACE Euskadi para contribuir a cimentar la paz y la reconciliación en nuestro país".

Presencia de expertos internacionales

El palacio de Aiete de San Sebastián acoge la Conferencia Internacional de Paz de Euskadi, organizada por el movimiento social vascoLokarri y elGrupo Internacional de Contacto, que lidera el abogado y mediador en los conflictos irlandés y sudafricanoBrian Currin. A lo largo de la mañana han desfilado por la puerta del palacete los seis expertos internacionales que junto a los invitados al conclave han consensuado el comunicado que pide a ETA un cese definitivo e irreversible.

El exsecretario general de la ONU Kofi Annanlidera una delegación internacional de la que también forman parte el líder del Sinn Féin, Gerry Adams, la exprimera ministra noruegaGro Harlem Bruntland, el negociador británico y mano derecha deTony Blair, Jonathan Powell, el exprimer ministro de Irlanda Bertie Ahern y el exministro francésPierre Joxe. A estas alturas, parece impensable creer que ninguna de estas personalidades se arriesgaría a participar en esta Conferencia de Paz sin el convencimiento de que irá acompañada, en los próximos días, de un comunicado de ETA.

Los expertos en la paz han sido discretos en su llegada. No los políticos, que han aprovechado la presencia de más de un centenar de medios nacionales e internacionales, para dejar claro su posicionamiento antes de entrar en la Conferencia.

El más contundente ha sido el exalcalde de ErmuaAntonio Totorikaquien espera que de esta conferencia salga una exigencia clara a ETA para que "deje inmediatamente de asesinar". Y ha reconocido entender a las víctimas y su temor de que la derrota "no quede clara". Porque, a su juicio, "tiene que quedar claro que hemos sido los demócratas y no otros lo que hemos conseguido esa derrota".

Etxeberría, sonriente

A su lado, disciplinado y en silencio, el presidente de los socialistas vascos, Jesús Eguiguren, atendía a las declaraciones de su compañero de partido. A Eguiguren le toca hablar en el interior. Solo dos minutos, como el resto de invitados, para exponer su postura. Una postura que reproducirá el plan de paz que presentó el lendakari, Patxi López, hace 15 días, y que recogía medidas penitenciarias si ETA abandonaba la lucha armada.

Rufi Etxeberría, máximo exponente de la izquierda abertzale, junto a Arnaldo Otegi y Rafael Díez Usabiaga, encarcelados, ha llegado sonriente y encorbatado. Para algunos puede ser una anécdota, o una tontería, pero es la primera vez en su vida que Etxeberria se ponía una corbata. Por la solemnidad del enclave y por lo que representará. "Un nuevo escenario político en Euskadi", según los aberzales, que este martes fijarán su postura política en una rueda de prensa.

Pello Urizar, de Eusko Alkartasuna, una de las tres formaciones que integran Bildu, ha dedicado sus dos minutos en el foro de la paz para asegurar que los últimos acontecimientos, la adhesión de los presos de ETA al Acuerdo de Gernika, y el cese el fuego de la banda, eran pasos "irreversibles en el fin de la violencia de ETA". Y se ha dirigido a los gobiernos francés y español: "Que son los que ahora deben de mover ficha y aplicar medidas como el acercamiento de presos, o el fin de la aplicación de la doctrina Parot".

El mensaje de Rubalcaba

En definitiva, y a escasas horas de la resolución del Comunidado, hay un convencimiento general de que estamos a las puertas del inicio de resolución del conflicto. "En los últimos pasos", como repite en las últimas semanas Alfredo Pérez Rubalcaba. Eso sí, casi todo el mundo en Euskadi, deja un margen para la prudencia. "Las palabras son solo palabras. Y en demasiadas ocasiones las palabras de ETA no tienen credibilidad", explica un dirigente socialista. Pero con una diferencia en relación a otros comunicados o altos al fuego anteriores. Ahora la izquierda abertzale le ha ganado el pulso a ETA. Los presos apuestan por el final de la violencia. Y la banda está militarmente acabada.

En ese contexto, a ETA, a estas alturas, no le queda más remedio que decir que la lucha armada se terminó para siempre, pero sin olvidar que habrá que dar una salida a sus presos, y a los exiliados en Venezuela y Cuba. Y todo esto en un contexto de mayoría absoluta del Partido Popular, pero con unas expectativas electorales para Amaiur que según algunos analistas vascos podría llegar a conseguir hasta siete diputados en el próximo Congreso.