UN CLAN ACORRALADO

La familia ¿sin Mas?

Jordi Pujol, antes de comparecer ante la comisión de Afers Institucionals, el pasado 26 de septiembre.

Jordi Pujol, antes de comparecer ante la comisión de Afers Institucionals, el pasado 26 de septiembre.

JOSE RICO / BARCELONA

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Una de las consecuencias inmediatas que tendrían las elecciones anticipadas sería el carpetazo a la comisión de investigación del 'caso Pujol', lo que ahorraría a Artur Mas la auditoría pública de los trapos sucios de la familia de su padre político y, por extensión, de Convergència. No obstante, el presidente de la Generalitat podría gozar de bula si la mayoría de grupos parlamentarios se alían este martes para impedir su comparecencia en dicha comisión. Por lo pronto, Ciutadans es el único partido que ha incluido a Mas en su lista de testimonios solicitados. Salvo que el resto de la oposición apoye la petición, el líder de CiU se librará de un careo al que sí tendrá que volver a someterse Jordi Pujol y, probablemente, su mujer, Marta Ferrusola, y los tres hijos que están imputados.

La puesta en marcha de la comisión sigue cociéndose a fuego lento. La votación de los comparecientes debería haberse sustanciado el próximo lunes, pero los grupos retrasaron la sesión 24 horas porque el PPC pidió más tiempo para perfilar su lista. Algunos grupos ya han hecho los deberes y, por el momento, está garantizado que el 'expresident' será citado de nuevo, ante las nulas explicaciones que, con bronca incluida, dio el pasado 26 de septiembre. Toda la oposición solicitará su comparecencia y la de sus tres hijos imputados en causas judiciales: Jordi, Oriol y Oleguer.

En cuanto a los otros cuatro vástagos y a Marta Ferrusola, solicitados por ICV-EUiA y Ciutadans, su presencia en el Parlament queda en manos de CiU, ERC y PSC, que podrían vetar las comparecencias. La diferencia de criterio estriba en el alcance que cada grupo quiere (o le interesa darle) a las pesquisas parlamentarias. El título de la comisión alude de forma genérica al «fraude y la evasión fiscales y las prácticas de corrupción política», pero de los testimonios requeridos por los principales partidos se desprende la voluntad de acotar las investigaciones a la confesión del 'expresident', los tejemanejes de su familia y los vínculos del clan con la Generalitat.

De ahí que muchos grupos hayan pedido la citación de figuras del círculo de confianza de Pujol en el Govern y en CDC, caso de Macià Alavedra y Lluís Prenafeta -imputados en el 'caso Pretoria'- y Miquel Roca. No ha sido el caso, en cambio, del 'conseller' de Empresa, Felip Puig, pese a su estrecha amistad con Jordi Pujol Ferrusola. Ni del 'president' Mas, que fue titular de Economia, 'conseller en cap' y secretario general de CDC antes de ser nombrado sucesor de Pujol.

Sin gesto hostil

Casual o no, ninguna de las fuerzas del bloque soberanista ha solicitado al 'president'. Tampoco el PSC, que se evita un gesto de clara hostilidad en plena fase de cortejo con Mas cara a los presupuestos. ERC, recién divorciada de CiU, aduce que si el jefe del Govern tiene que comparecer en el futuro, debe hacerlo en la comisión de Afers Institucionals, pero no en una de investigación. La CUP también ha renunciado a citar al líder de CiU, aunque sí quiere oír a los 'consellers' Felip Puig y Germà Gordó y al 'expresident' José Montilla. La renuncia de la CUP, cuyo diputado David Fernàndez preside la comisión y se comprometió a dimitir si los partidos se ponían de acuerdo para bloquear comparecencias incómodas, sorprende casi tanto como la de ICV-EUiA.

Los ecosocialistas anunciaron la semana pasada en rueda de prensa que citarían a Mas, pero en el último momento se han echado atrás. No descartan plantearlo en un futuro, según cómo evolucione la comisión, pero alegan de entrada que «no es el momento para evitar que se pueda tergiversar la comparecencia con cosas que nada tienen que ver con la comisión». Quien sí deberá responder, salvo veto de CiU, es la líder del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, requerida por ERC, ICV-EUiA y la CUP, aunque no por Ciutadans, por su famoso almuerzo en La Camarga con María Victoria Álvarez, expareja de Jordi Pujol Ferrusola, que también tiene prácticamente asegurada la citación.

Más allá del clan Pujol, los principales implicados en escándalos como 'Método 3', 'Pretoria', 'Mercuri' e 'Innova' tienen muchos números de ser llamados. En manos de CiU, que no quiso avanzar ayer ninguna de sus peticiones, quedan los testimonios de los expresidentes Felipe González y José María Aznar, varios exministros de PP y PSOE y el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, además de la número dos del PP, María Dolores de Cospedal. Pero antes de que llegue el turno de los políticos, por la comisión desfilarán un buen número de expertos, entre los que podría estar Hervé Falciani, solicitado por ERC, ICV y la CUP.