LA LUCHA CONTRA EL YIHADISMO

El Estado Islámico tenía una célula fija en Catalunya

Agentes policiales se llevan a uno de los arrestados, en L'Hospitalet.

Agentes policiales se llevan a uno de los arrestados, en L'Hospitalet.

MAYKA NAVARRO / MADRID

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En esta ocasión, los ocho presuntos miembros de la célula yihadista desarticulada la pasada madrugada en BarcelonaGironaCiudad Real Ávila actuaban a las órdenes de un enlace del Estado Islámico, ubicado en Siria. Los detenidos, seis hombres y dos mujeres, de nacionalidad española constituían un grupo "muy activo" en las redes sociales que utilizaban para reclutar jóvenes para engrosar las filas del Estado Islámico. "Del análisis del material intervenido y del rastreo de sus comunicaciones podremos concretar a cuántas personas tenían ya convencidas", indicaron fuentes de la investigación.

Los especialistas de la Comisaría General de Información de la Policía entienden que esta operación da un paso más en el perfil de los detenidos. "Demostraremos sus vinculaciones directas con responsables del Estado Islámico", añadieron los mismos interlocutores.

Y el centro de operaciones, una vez más, Catalunya. Los arrestados, cinco de origen marroquí, incitaban por internet a la comisión de acciones terroristas. Entre sus objetivos estaba, según una nota del ministerio de Interior, la captación de acólitos entre inmigrantes o españoles de origen marroquí "con nulo o bajo conocimiento de árabe". A estas personas se las adoctrinaba e "imbuía insistentemente en la necesidad de cometer acciones terroristas en territorio nacional".

Los arrestados tenían capacidad de poner en contactacto a los captados con otros escalones de la organización ubicados en Siria e Irak para facilitarles la información para unirse a la resistencia. Los investigadores han identificado a uno de sus operativos en Siria sobre el que ya pesa una reclamación judicial internacional por terrorismo, dada su vinculación con investigaciones anteriores.

VECINOS DE PIERA

Una de las mujeres detenidas es una española casada con un marroquí, vecina de Piera, y madre de seis hijos. Daba clases de árabe a niños de la localidad. También hay una joven de 18 años de Figueres. Su hermano también ha sido detenido. La madre de otro de los detenidos negó que su hijo sea terrorista y aseguró que "solo es un niño que opina en las redes sobre el Islam".

"El grupo representaba una amenaza grave, concreta y continuada a la seguridad nacional dado que sus miembros trabajaban en exclusiva con la finalidad de propagar el ideario terrorista multiplicando con su actividad la creación de nuevas células activas", afirmaba la nota que difundió Interior.

Para esta investigación, la Policía contó con la colaboración de la Dirección General de Seguridad del Territorio de Marruecos, los servicios secretos marroquíes que trabajan en estrecha colaboración con España en los últimos tiempos.

PROPAGANDA

En los registros los investigadores han encontrado abundante propaganda, en forma de vídeos, de proselitismo y exaltación de la yihad. En uno de los domicilios catalanes se han incautado varias escopetas de caza. La operación ha sido dirigida por el titular del Juzgado Central de Instrucción número tres de la Audiencia Nacional, Javier Gómez Bermúdez y el fiscal José Perals.

La redada de ayer es la tercera que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado llevan a cabo este año. Las detenciones no guardan relación con la detención el pasado martes de otros dos jóvenes en Ceuta a los que el juez Pablo Ruz envió el jueves a prisión. Estos pertenecían a otra célula que según los investigadores estaba en fase de recopilar información para atentar. Según fuentes policiales, habían realizado seguimientos a policías en Ceuta y tenían fotografías de edificios oficiales, a modo de objetivo para posibles atentados.

En cualquier caso, a la última célula no se le atribuye una intención de atentar, sino de reclutar y buscar adeptos a la causa del Estado Islámico. Según las últimas cifras oficiales, unos setenta españoles o extranjeros con residencia en España están actualmente combatiendo en las filas terroristas del Estado Islámico, sobre todo en Siria. De estos, diez han regresado. Cinco están encarcelados y del resto no hay ninguna información oficial.