CDC acoge con prudencia la previsión de victoria electoral

El mapa político catalán y español es tan cambiante que todos los partidos elevan la prudencia a la hora de analizar las tendencias que marcan las encuestas. Incluso si los sondeos les dan como vencedores. Ayer el coordinador general de CDC, Josep Rull, puso en práctica esta moderación a la hora de valorar la victoria que obtendría CiU si hoy se celebraran comicios autonómicos, según el barómetro político de Catalunya elaborado por GESOP para EL PERIÓDICO, publicado ayer.

Rull afirmó que existe base para el avance del soberanismo pero avisó de que debe ampliarse este perímetro para que «esta opción sea inequívocamente victoriosa». Para el número dos convergente los datos del barómetro demuestran la «inquietud de la ciudadanía por la regeneración democrática». «Es importante vincular el nuevo Estado con el concepto de la regeneración democrática, que puede quedar concretada en Podemos», añadió en relación al pronóstico de GESOP, que sitúa a la nueva fuerza que lidera Pablo Iglesias en tercera posición en Catalunya. En este sentido, en una conferencia en Nueva Economía Forum, en Barcelona, Rull destacó que se debe superar el concepto arcaico de los partidos clásicos «y buscar algo sensiblemente diferente».

El líder socialista Pedro Sánchez trató de restar importancia al nuevo descenso que prevé esta encuesta para el PSC si se celebrasen hoy elecciones autonómicas. Sánchez insistió en que se trata «de la foto de un momento» y que el PSC representa la «centralidad» en Catalunya y debe trabajar para recuperar terreno. El dirigente socialista, de visita en Barcelona, mostró su «plena confianza» en el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, a quien dijo que apoyará plenamente si se anticipan los comicios autonómicos.

ERC RELATIVIZA EL RESULTADO

Por su parte, aunque según la muestra Esquerra Republicana perdería la primera posición, los republicanos relativizaron la victoria de CiU subrayando que en el mejor momento de éxito de Mas tras el 9-N, su intención de voto es del 20,8%, muy por debajo del 20,4% que obtuvo en el 2012.

Otro de los elementos destacados del sondeo es el ascenso de Ciutadans, que pasaría a disponer de 16 o 17 escaños en el Parlament, con una intención de voto ligeramente inferior a la irrupción de Podemos. El líder de Ciutadans, Albert Rivera, destacó que según la encuesta, CiU y ERC no dispondrían de la mayoría absoluta que actualmente sí suman en el Parlament. Rivera afirmó que el aumento de Podemos demuestra una «expectativa de castigo». «Es evidente que PP y PSOE pasan a ser fuerzas decadentes», lo cual vio como algo «preocupante» desde el punto de vista constitucional.