Pleno en la Cámara catalana

Un CAC sin periodistas

La elección de Loppacher y Sirera, pactada entre CiU y PPC, llena de perfiles políticos el órgano de control de los medios audiovisuales

Nuevos consejeros 8 Roger Loppacher y Daniel Sirera, ayer en la tribuna de invitados del Parlament.

Nuevos consejeros 8 Roger Loppacher y Daniel Sirera, ayer en la tribuna de invitados del Parlament.

J. R. / R. J.
BARCELONA

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¿Quién controla a quien controla? En las democracias, el papel de los medios de comunicación es el control crítico de los gobernantes y de los políticos en general. Desde ayer, en Catalunya, se han girado las tornas y el máximo órgano de control de los medios audiovisuales está en manos de seis excargos de partidos y políticos que ya no están en primera fila. Pese a que la reformada ley que regula su funcionamiento exige para su elección criterios de«profesionalidad e independencia»,ningún periodista llevará las riendas del Consell de l'Audiovisual de Catalunya (CAC), que alcanza así su cénit de politización tras la renovación pactada por CiU y el PPC, y que fue aprobada entre fuertes críticas de la izquierda.

El único periodista que quedaba en la dirección del CAC, Ramon Font, dimitió hace dos semanas para facilitar, precisamente, esa renovación de cargos. El nuevo presidente será Roger Loppacher, quien ha ocupado la vicepresidencia de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA) los últimos cuatro años. Miembro del cuerpo de abogados de la Generalitat, en su currículo figura haber sido director general de Mitjans Audivisuals, secretario general de los departamentos de Interior y Governació y vicepresidente del consejo rector del Centre de Telecomunicacions de la Generalitat, siempre bajo mandato de CiU. Su nuevo salario rondará los 100.000 euros.

El PPC aceptó este nombre a cambio de que CiU le garantizase la última silla del consejo (con la reforma legislativa, el CAC pasará de 10 a seis miembros) a su candidato, Daniel Sirera. Los populares catalanes reubican así a su expresidente, antecesor en el cargo de Alicia Sánchez-Camacho, y que en la actualidad forma parte del consejo asesor del Institut Catalunya Futur, la rama catalana de la FAES. Como consejero del CAC, cobrará alrededor de 80.000 euros.

Los votos de CiU y PPC, que ya pactaron en solitario la renovación de la corporación de TV-3 y Catalunya Ràdio, cerraron el paso al único candidato periodista. Para evidenciar la politización del órgano, ICV-EUiA y ERC propusieron conjuntamente a Salvador Alsius, cuya larga trayectoria en los medios de comunicación incluye la dirección delTelenotícies Migdiadurante los primeros años de TV-3 y de varios programas posteriores, así como el decanato del Col·legi de Periodistes de Catalunya de 1997 al 2002.

Abstención socialista

El PSC optó por la abstención para que no se le pudiese acusar de obstruccionismo, ni tampoco de complicidad del pacto CiU-PPC. Los socialistas mantienen en el CAC a dos representantes: Carme Figueras y Elisenda Malaret. La primera es diplomada en Ciencias Físicas y fueconsellerade Benestar i Família, además de diputada autonómica. La segunda es catedrática de Derecho y ocupó un escaño en el Congreso.

En las dos sillas restantes seguirán sendos representantes de CiU. Esteve Orriols, abogado, fue diputado autonómico de 1984 al 2010 y alcalde de Vilanova i la Geltrú de 1994 a 1999. Josep Pont, informático, perito mercantil y técnico de márketing, fue alcalde de Bellpuig (1997-2007) y presidió la Diputación de Lleida (1999-2003).