Quim Brugué ve "una cierta escenificación y maniobra" en los pasos hacia la consulta

El catedrático de Ciencia Política de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) Quim Brugué, que anunció este domingo que renunciaba a formar parte de la comisión de control del 9-N9-N, ha apuntado a las "dificultades" para dotar a la consulta soberanista de unas "mínimas garantías de neutralidad democráticas". "Tengo indicios y una cierta sospecha de que estamos haciendo una cierta escenificación y maniobra, pero acabaremos haciendo una cosa diferente a la consulta", ha afirmado.

En declaraciones en 'El món a RAC-1', Brugué ha lamentado también que los 800 alcaldes y concejales que el sábado entregaron al 'president' Artur Mas las mociones aprobadas en 920 municipiosArtur Mas  a favor de la consulta finalizaran el acto en el Palau de la Generalitat con consignas por la independencia. El catedrático, cuya decisión avanzó el domingo la publicación digital Crític, tras lo que el catedrático la comunicó en su cuenta de Twitter, ha criticado la falta de neutralidad de las instituciones municipales ante Mas al inclinarse claramente por el 'sí sí' en lugar de limitarse a defender el derecho a decidir.

"Me parece que nos estaríamos haciendo más mal que bien si tiramos adelante la consulta en estas condiciones", ha afirmado Brugué. Sobre la cumbre de siete horas del viernes del Govern con los partidos del bloque proconsulta (CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP), ha criticado el hecho de que, en las declaraciones posteriores de los participantes, "no se dijo cómo se hará" la consulta.

Tras señalar en Twitter que su renuncia es "personal" y que aceptaba "todas las críticas", aunque no puede avalar una consulta que, en su opinión, "no ofrece garantías democráticas", Brugué aseguró: "Ahora sé qué es un linchamiento tuitero".