UNA COMPLEJA INVESTIDURA

Mas: "La CUP puede decidir elecciones, pero no 'president'"

"Hasta aquí hemos llegado y de aquí no pasamos", advierte antes de insistir que no se retirará como candidato ni mejorarán la propuesta de acuerdo

Antonio Baños y Artur Mas en el Parlament de Catalunya.

Antonio Baños y Artur Mas en el Parlament de Catalunya. / periodico

ROGER PASCUAL / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

"Hasta aquí hemos llegado y de aquí no pasamos". Así de claro ha sido Artur Mas que, pese a que el límite para la investidura (9 de enero) se acerca peligrosamente, no piensa moverse ni un centímetro más. Tras el empate en la asamblea de la CUPJunts pel Sí no cambiará el candidato ni mejorará la propuesta de acuerdo porque "la CUP puede decidir elecciones, pero no 'president'". "No podemos cambiar candidato porque daríamos el mensaje que las grandes decisiones las toma la CUP", ha dicho en una entrevista con Mònica Terribas en el programa 'El Matí de Catalunya Ràdio'.

"Es una situación absolutamente absurda que nos la podríamos haber ahorrado", ha reconocido el 'president' en funciones, coincidiendo con el 

{"zeta-legacy-phrase":{"name":"Artur Mas","position":"'PRESIDENT' EN FUNCIONES","text":"\"En alg\u00fan momento de la nueva legislatura habr\u00e1 que volver a las urnas para comprobar si realmente hay m\u00e1s de un 50% a favor de un Estado independiente\""}}

malestar que sentía Carles Campuzano, número 2 de Democràcia i Llibertat en el Congreso, que iba más lejos al pedir cambiar de aliados o ir a elecciones. "Se calienta con la situación, no le gusta, como a muchos pero tenemos que esperar agotar el tiempo", señaló el 'president'. Muchos en Junts pel Sí se muerden la lengua pero, como recuerda Mas, romper la baraja y convocar ya las elecciones no está en su mano y tampoco hay alternativas de investidura; por tanto, no queda más que esperar. "La normativa nos obliga a actuar de estar manera. Hasta el 10 de enero hay vida. Si el 10 de enero la CUP decide que vamos a elecciones entonces iremos sin miedo ni rencor, como si fuera una segunda vuelta". Unos nuevos comicios en los que no ha querido aventurar si se repitiría la coalición de Junts pel Sí, una fórmula que ya no se reeditó en las pasadas elecciones generales.

APUESTA POR EL REFERÉNDUM

"No soy un obstáculo ni un problema -ha afirmado Mas-. El problema es cómo protegemos y garantizamos mejor el proceso soberanista catalán". El 'president' ha insistido que su negativa a renunciar a la investidura no era por un tema personalista. "Soy el candidato de Junts pel Sí desde el primer momento. Tuvimos 1.600.000 votos. Aquí no sobra nadie ni mi espacio político, ni Esquerra, ni los independientes ni la CUP. Hay que sumarlo todo, un proceso así no se puede hacer vetando sino votando. Si la CUP pone el veto a una persona y acaba inclinando la balanza y vamos a elecciones es porque tienen 10 diputados. Tienen mucha fuerza, suficiente para convocar elecciones, pero no tanta como para cambiar un 'president'". En este sentido ha reconocido su sorpresa por el empate en la asamblea de los anticapitalistas. "Me sorprendió mucho, no pude entender que se pudiera llegar a empatar. He estado en muchísimas votaciones en mi vida y con ese volumen de gente nunca he visto un empate". 

Después de sentenciar que no tiene "miedo ni del Estado ni de la CUP", ha asegurado que los casos de corrupción que afectan a su partido han sido "tremendamente magnificados desde que ha empezado este proceso". Tras alabar la defensa de Podemos del referéndum a la otra orilla del Ebro un referéndum (y recordar que no tiene apoyo de los grandes partidos en el Congreso), ha dejado caer que en la próxima legislatura catalana habrá que ver en las urnas si hay una mayoría independentista: "En algún momento de la nueva legislatura habrá que volver a pasar por las urnas para comprobar, en las condiciones de ese momento, si realmente en Catalunya hay más de un 50% de la gente a favor de constituir un Estado, e incluso, un Estado independiente, o no, y entonces actuar en consecuencia".

"UN EMPATE NO ES UNA RESPUESTA"

Tras la entrevista, Mas ha presidido el último Consell Executiu del año. Neus Munté, portavoz y vicepresidenta del Govern en funciones, ha negado en la rueda de prensa posterior que la Generalitat lleve medio año parada, pero ha pedido que el 2016 llegue con una investidura bajo el brazo. "El Govern no está parado ni lo estaba antes de las elecciones ni los está ahora. Sigue trabajando, deseando, eso sí, poder hacerlo con la normalidad con un 'president' investido. Que las cosas puedan avanzar en el 2016. Lo antes posible y con la máxima velocidad de crucero". Munté, que ha estado muy implicada en las negociaciones con la CUP, ha reclamado a la formación anticapitalistas que dé una respuesta clara y definitiva el sábado para no alargar la incertidumbre: "Hay una oferta muy trabajada a la CUP hecha en tiempo, forma y con contenidos potentes. No hay ni habrá otra. Necesitamos una respuesta de la CUP que no ha llegado porque, en términos políticos, un empate no es una respuesta. Como decía Romeva, la CUP ha empatado y tiene que desempatar".