Arran propone expropiar negocios turísticos y Colau les exige "una reflexión"

La formación independentista juvenil Arran ha difundido un comunicado en el que evita referirse a posibles nuevas acciones violentas -tras la polémica actuación contra un bus turístico en Barcelona- y se limita a plantear críticas al modelo turístico y formular propuestas como "expropiar las principales empresas y activos turísticos del país" como puertos deportivos, el Hotel Vela, Las Arenas o Port Aventura para poner "los beneficios económicos que generan al servicio de la población". 

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha respondido reclamando al colectivo independentista "una reflexión" sobre las acciones de corte vandálico cometidas en los últimos días. "La ciudadanía lo que valora son las propuestas", afirma Colau, afeando a Arran su responsabilidad en "unos ataques y unos incidentes que asustan a las personas y que estropean bicicletas y autobuses".  

Para Colau, la crítica al modelo turístico de la capital catalana es totalmente legítima. "Estamos haciendo cambios, por primera vez hay un liderazgo público", ha subrayado la alcaldesa, quien ha recordado que ya se ha ordenado el cese de la actividad de 2.000 pisos turísticos ileglaes y que la actual tasa turística no solo se destina a la promoción del turismo sino también a acciones para compensar a los barrios más afectados por el turismo masivo.

"LUCHA COMPLETAMENTE LEGÍTIMA"

El texto de Arran se desmarca del concepto de "turismofobia", que considera un término "inventado" que "intenta desvirtuar una lucha completamente legítima". El comunicado asegura que Arran no está "en contra de los turistas ni del turismo, nosotros tambén lo somos y sabemos que viajar es una actividad humana que puede ser muy enriquecedora" sino del actual modelo turístico.

El comunicado soslaya la polémica sobre las actuaciones violentas, más allá de reafirmar que Arran ha decidido "pasar a la acción". Pero la nota se centra en proponer una serie de medidas. Entre las cuales, "parar de forma inmediata" la emisión de licencias de actividad para hoteles y empresas vinculadas al turismo, así como "prohibir de forma inmediata la actividad de las empresas relacionadas con los pisos turísticos", como Airbnb, regular el precio de la vivienda, mejorar las condiciones laborales en las empresas relacionadas con el turismo.

Arran finaliza el comunicado animando a participar en las plataformas y entidades contrarias a la masificación turística. Pero elude referirse a la reproducción de acciones polémicas como la referida del bus turístico, más allá de asegurar que "solo con la lucha y la autoorganización popular" se logrará cambiar el actual modelo turístico.