Alfonso Guerra carga contra Gabriel Rufián y el "veneno" nacionalista

"España no es una nación de naciones", dice el exvicepresidente, que denuncia el populismo del nacionalismo catalán

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ROGER PASCUAL / BARCELONA

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Desde Asturias, feudo del presidente de la gestora del PSOE, Alfonso Guerra cargó con dureza contra Gabriel Rufián y los nacionalismos.

"No se pueden legitimar Rufianes", dijo en alusión al diputado republicano en el 125 aniversario de la Agrupación Socialista de Gijón. En este sentido criticó que no hubiera habido una respuesta más contundente del PSOE a sus críticas durante el debate de investidura de Mariano Rajoy. "Deberían haber salido todos los diputados en tromba, debemos un respeto a los militantes que crearon el partido", comentó Guerra, que había defendido la abstención socialista por sentido de estado.

"El odio a la derecha no puede ser el programa del PSOE", aseguró en su intervención, en la que también sacudió con fuerza a Podemos, se

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explayó en su ataque a los nacionalismos. En este sentido advirtió que había que evitar concesiones a los nacionalistas en la reforma constitucional. "España no es una nación de naciones", sentenció con su proverbial virulencia. Poniendo el foco en Catalunya y con la mirada puesta en el PSC alertó sobre el peligro del independentismo catalán, denunciando que "su veneno llega hoy a los socialistas". Para el exvicepresidente español el nacionalismo catalán es otra forma de populismo en la que solo buscan dar respuesta a determinados sectores de la sociedad y "levantar muros dentro del propio país".

LA RESPUESTA DE TARDÀ

Joan Tardà se ha encargado de responder este lunes al Guerra, que cuando era presidente de la Comisión Constitucional del Congresose jactó de haberse "cepillado" el Estatut catalán "como un carpintero". "Guerra es el ejemplo del odio a Catalunya y expresión de un deseo perverso: que el proceso fuera violento. Puest no, cívico y pacífico", ha respondido el compañero de Rufián en el Congreso.