Un acuerdo responsable votado por la mayoría

Esta semana ha sido una de las más intensas de la presente legislatura. Y también una de las más trascendentales. A tres meses de unas elecciones generales, hemos alcanzado un acuerdo político, con una amplísima mayoría, para sentar las bases que nos permitan superar los errores de la política económica de los últimos tres años y, al mismo tiempo, lanzar un mensaje inequívoco de responsabilidad política y madurez institucional.

Hace más de un año, el presidente del PP,Mariano Rajoy,propuso introducir en la Constitución el principio de estabilidad presupuestaria. Ahora, más del 90% de los diputados lo han avalado con su voto, lo que reabre las puertas del crecimiento económico y la creación de empleo. Un objetivo compartido por la inmensa mayoría de los ciudadanos que supone, además, asegurar la sostenibilidad de las políticas sociales y avanzar en la consolidación del Estado de las autonomías.

La nueva redacción del artículo 135 de la Constitución se convierte así en una garantía para los ciudadanos y en una exigencia para todos los gobernantes. Una garantía de que las administraciones no gastarán más de lo que ingresan, evitando de esta forma poner en riesgo los derechos y las políticas sociales. Y la seguridad de que, gobierne quien gobierne, los impuestos se destinarán a financiar nuestro bienestar y no a pagar los intereses desmedidos de una excesiva deuda.

Esta reforma es la mayor expresión de nuestro compromiso con el interés general. Por eso hemos logrado un gran consenso. Es verdad que no están todos, pero también es cierto que el PP ha demostrado su voluntad de acuerdo, desde que propusimos esta iniciativa, hace un año, y hasta el último minuto de la negociación.

Hemos puesto todo de nuestra parte para buscar un punto de encuentro desde el que dar respuesta a la principal demanda de los ciudadanos: salir de la crisis. Algunos han considerado que ése no es su objetivo prioritario. Para el Partido Popular, en estos momentos, es el único.