El abogado de Urdangarin admite que contrató a una empresa para que ordenara correos del 'caso Nóos'

Morenés niega que el 'hacker' que hizo el trabajo sea un agente del CNI, aunque reconoce que fue contratado de forma puntual

Urdangarin y su abogado, Mario Pascual Vives, salen de los juzgados de Palma, el 25 de febrero del 2012.

Urdangarin y su abogado, Mario Pascual Vives, salen de los juzgados de Palma, el 25 de febrero del 2012.

MAYKA NAVARRO / Madrid

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El abogado de Iñaki Urdangarin, Mario Pasqual Vives, ha confirmado este martes por la mañana que contrató a una empresa experta en informática de la que no recordaba el nombre --la del reconocido 'hacker' argentino Matias Bevilacqua-- para que pusiera en orden unos correos entregados a las partes por el juez que instruye el 'caso Noos', José Castro. A las puertas de su despacho del paseo de Gràcia de Barcelona, el abogado del yerno del Rey, ha reconocido, como publica este martes EL PERIÓDICO, que el 9 de enero del 2012 contrató los servicios de la prestigiosa empresa informática de Bevilacqua.

Pasqual Vives aseguró desconocer si Bevilacqua trabajaba puntualmente para el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), como a primera hora de la mañana ha reconocido en los micrófonos de la COPE el ministro de Defensa, Pedro Morenés. El ministro ha asegurado que la empresa del informático, CF Labs, obtuvo un contrato en el 2008 para "temas de sofwarte y conocimientos informáticos". No obstante, ha negado rotundamente que Bevilacqua haya sido "nunca", ni ahora, agente del CNI. "Ahora, desde el años 2008, ya no trabaja para el CNI por ninguna razón, sino simplemente porque se acabó su contrato. El CNI aprendió todas las técnicas que este señor sabía", ha concluido Pedro Morenés.

Las primeras alarmas

Hace unos meses, las alarmas saltaron en los juzgados de Palma de Mallorca, cuando el fiscal anticorrupción de Barcelona, Fernando Bermejo, supo que un 'pen drive' de Bevilacqua, detenido en el transcurso de la operación Pitiusa, contenía miles de correos vinculados con Nóos. ¿Qué hacían esos correos en el despacho de un 'hacker' que colabora habitualmente para el CNI?

Bermejo trasladó sus inquietudes al fiscal de Palma, Pedro Horrach, y el juez Castro abrió unas diligencias secretas, separadas, que siguen abiertas. Tras interrogar a varias personas, los investigadores comprobaron que Pasqual Vives contrató a Bevilacqua y que este, a partir del 'pen' inicial, consiguió acceder a unos servidores y recuperar otros 10.000 correos electrónicos que habían sido borrados o no entregados en la causa.