Los abogados de la izquierda aberzale Zulueta, Sarriegi y Emparantza salen de prisión tras abonar una fianza

Los abogados Iker Sarriegi y Jon Emparantza, acusados de servir de nexo entre ETA y los presos encarcelados de la banda terrorista, han abandonado en torno a las 16.00 horas las prisiones de Puerto III (Cádiz) y Granada, respectivamente, tras abonar los 60.000 euros de fianza impuestos por la Audiencia Nacional, han informado fuentes penitenciarias. Ayer salió de la cárcel de Málaga en las mismas condiciones la letrada Arantza Zulueta, acusada también de integrar el grupo de abogados de la banda, denominado H-Alboka. 

La Audiencia Nacional acordó ayer jueves la prisión eludible con una fianza de 60.000 euros de para los tres abogados de presos de ETA, que han permanecido en prisión siete meses y medio. La Sección Tercera de la Sala de lo Penal argumenta que las medidas cautelares impuestas y la situación de "arraigo social" de los imputados, a los que se atribuye un delito de integración o colaboración con organización terrorista, aminoran el riesgo de fuga y de reiteración delictiva. 

El tribunal, integrado por los magistrados Alfonso Guevara, Guillermo Ruiz Polanco y Clara Bayarri, obliga además a los tres letrados a cumplir comparecencias semanales, no salir del territorio nacional y entregar sus pasaportes en el plazo de 24 horas desde su puesta en libertad.

En el caso de Sarriegui, la resolución judicial sostiene que aunque el riesgo de fuga continúa siendo "incuestionable" y el delito imputado es "grave", el imputado cuenta con "un entorno social y familiar de claro apoyo que compromete por él su palabra", lo que "minimiza" la posibilidad de que se sustraiga a la acción de la justicia o vuelva a delinquir.

Esta resolución, que lleva la firma de Bayarri, destaca que el padre de Sarriegui es "una persona muy querida y apreciada" en San Sebastián porque "ha pertenecido más de 38 años" al equipo de fútbol de la Real Sociedad, "donde ha desarrollado diferentes labores desde entrenador, responsable del grupo de ojeadores, responsable de las relaciones con los clubs de la provincia y, finalmente, delegado del campo de Atocha".

La Fiscalía no recurrirá la decisión

La Fiscalía no recurrirá la puesta en libertad al considerar que "llevan mucho tiempo en prisión" y que las medidas cautelares que se les han impuesto son "suficientes" para asegurar su sometimiento a la acción de la Justicia. 

Así lo han indicado fuentes del Ministerio Público que han descartado la posibilidad de presentar un recurso de súplica contra los tres autos dictados por la Sección Tercera de la Sala de lo Penal. Las citadas fuentes también han destacado la proporcionalidad de las medidas cautelares adoptadas por el tribunal para evitar la sustracción de los imputados a la acción judicial, en referencia a la obligación de cumplir comparecencias semanales, la imposibilidad de salir del territorio nacional y la entrega de sus pasaportes en el plazo de 24 horas desde su puesta en libertad.

El fiscal del caso, Luis Barroso, se opuso por escrito a las tres peticiones de libertad aunque en la vista en la que el tribunal analizó los recursos puso de relieve que los imputados llevaban siete meses y medio en prisión, planteamiento "en gran medida diferente al evacuado por escrito", tal y como recogía el auto correspondiente a la situación procesal de Arantza Zulueta. 

"Comisarios" de la organización terrorista

Los tres letrados fueron encarcelados el pasado 19 de abril por orden del juez Fernando Grande-Marlaska por actuar como correos entre la dirección de la banda y sus presos. El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, les había calificado además de "comisarios" de la organización terrorista.

Marlaska envió a los letrados a la cárcel, así como a los trabajadores de sus despachos Saioa Aguirre Arauco y Naia Zuriarrain Mendiguren, por considerar que entre las funciones que realizaban se encontraban intermediar en la "gestión y cobro" del impuesto revolucionario, facilitar la huida de etarras, captar nuevos militantes  e informar sobre posibles objetivos, como el presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Iñigo Urkullu, otros dirigentes de la formación nacionalista y tres escoltas de cargos públicos.

También acordó, tras más de siete horas de interrogatorios, la libertad de Juan María Jáuregui Zalakain y Asier Etxabe Azkue bajo fianzas de 30.000 y 12.000 euros, respectivamente, e impuso comparecencias judiciales a Erramun Landa Mendibe y José Luis Gallastegui Lagar.

Los tres abogados han permanecido en prisión siete meses y medio. Fueron arrestados el pasado 14 de abril junto a otros nueve acusados de integrar el grupo H-Alboka. Ninguno de los arrestados en aquel operativo permanece en la cárcel.