CiU y PP atacan por "electoralistas" las ayudas del Govern a los 'ni-ni'

Plantear una medida de gobierno que beneficiará a 5.000 ciudadanos de una tacada, a menos de un mes de las elecciones, puede provocar suspicacias. En el caso del plan del Govern para crear 5.000 contratos formativos a jóvenes que ni estudian ni trabajan, los famososni-ni,el guión se cumplió a rajatabla. CiU, PP no quisieron ni tan solo entrar en el fondo de la cuestión y despacharon la medida tildándola de «electoralista». Esquerra e ICV cerraron filas con sus socios de Govern y aplaudieron el plan de la Conselleria de Treball (PSC). Como mucho, ambas fuerzas se permitieron críticar la propuesta electoral del PSC, distinta que la que ha diseñado Treball, de establecer un subsidio para estos jóvenes.

El portavoz de la federación nacionalista en el Parlament, Oriol Pujol, tras insistir en la cercanía entre la publicación en el DOGC de la medida y la fecha de las elecciones, afirmó que la iniciativa de la Generalitat pretende poner un «parche» a la «evidencia» de no haber hecho nada en favor del empleo juvenil tal y como demuestra, dijo, ese 30% de jóvenes que han dejado los estudios y no han encontrado un trabajo.

La receta del portavoz convergente para atajar este problema no pasa por «la política de la subvención», sino por crear las condiciones para que sean los empresas las que contraten a jóvenes.

Para el PPC -en concreto, para su secretario general y número dos de la candidatura, Jordi Cornet-, la medida de Treball es «poco creíble y demagógica». El dirigente popular también arremetió contra la gestión del Govern en esta legislatura, por la que, a opinión de Cornet, José Montilla «pasará a la historia por ser elpresidentdel paro juvenil».

APOYO DE LOS SOCIOS / La fuerza más vehemente en la defensa del plan de Treball fue Esquerra. Su portavoz parlamentaria, y número 3 en la lista por Barcelona para los comicios de fin de mes, Anna Simó, recomendó a todos aquellos que califican la medida como «electoralista» que «vayan a la hemeroteca» y recuperen el anuncio que José Montilla hizo ya en mayo del 2008.

Para Simó, las «becas-salario» son fruto de un largo proceso de trabajo y, de hecho, llegan tarde, pues estaba previsto que se aplicaran a partir del curso 2009-2010. «Los acuerdos no se improvisan, y el Govern gobernará hasta el último día», sentenció la republicana.

Menos tajante se mostró Simó al valorar la propuesta electoral del PSC de subsidiar a los jóvenes. «Quizá alguien ha querido ponerse a rebufo de la medida del Govern y, si es así, tiene un punto de oportunismo», señaló delicadamente sin querer profundizar en las críticas.

Los socios minoritarios del Ejecutivo catalán, ICV, también aplaudieron la medida. Su portavoz, Laia Ortiz, rechazó que se trate de una subvención a estos jóvenes a los que reclamó que se deje de llamarni-ni, puesto que este apelativo solo sirve, dijo, «para estigmatizarlos».