Comunicado de ETA a la comunidad internacional

ETA, la organización revolucionaria socialista vasca para la liberación de la nación, quiere expresar mediante este comunicado su respeto y agradecimiento hacia los hombres y mujeres que firmaron la Declaración de Bruselas el pasado marzo de 2010. ETA considera lo que se cita en ella como aportación a tener en cuenta. Por lo tanto, queremos informar sobre nuestras reflexiones a los firmantes de la Declaración de Bruselas y, en general, a la comunidad internacional:

Euskal Herria es un pueblo antiguo. Un pueblo pequeño, sencillo, humilde. Bastante conocido a lo largo y ancho del mundo por haber luchado desde su pequeñez para conservar el idioma y la identidad de nuestros antepasados. En cambio, el nuestro es un pueblo sin confesión política, un pueblo negado durante mucho tiempo por Francia y España, partido bajo las administraciones de ambos estados y sin derechos civiles. Los citados estados han realizado infinitos esfuerzos para acabar con Euskal Herria, para hacerla desaparecer bajo la asimilación política, social y cultural de Francia y España.

Euskal Herria ha sido pisoteada durante siglos. Pese a que la evolución histórica de España y Francia ha conocido diferentes sistemas políticos, los mandatarios de cada época han coincidido en la no aceptación de Euskal Herria. Y nos han condenado a ser una ciudadanía sin pueblo durante siglos, generaciones, a no poder vivir en Euskal Herria como ciudadanos y ciudadanas vascas, a que no podamos manifestar nuestra identidad.

Euskal Herria ha sufrido una cruda represión y duros ataques. El más conocido de ellos fue la masacre originada por el bombardeo fascista de Guernica, sobre todo desde que Picasso inmortalizó la memoria de la injusticia en sus pinturas. Pero no ha sido la única, ni siquiera la primera. La persecución de la condición vasca ocupa muchas páginas en el libro de la historia de nuestro pueblo.

La lucha de Euskal Herria se ha prolongado durante siglos. Aunque hubo alguna que otra gota que colmó el vaso, durante todos estos años el pueblo ha protagonizado numerosas rebeliones y levantamientos que reflejan su voluntad de independencia.

En muchas ocasiones hemos experimentado el fracaso y la cruda represión. Así, hemos vivido de cerca la cárcel, la tortura y el exilio. La ciudadanía vasca ha hablado de frente al sufrimiento, a la nostalgia. Otras veces, se ha calmado el enfado y la inquietud del pueblo con engaños políticos que no implicaban cambios profundos. También el fracaso, en último término. Y la herida sin cicatrizar pronto volvería a derramar sangre.

La historia le ha dado a Euskal Herria una enseñanza fundamental: que las pseudo-soluciones de hoy son fuente de los conflictos de mañana.

Que el rendirse hoy condenará mañana a nuestros hijos e hijas.

Hemos vivido muchos fracasos. Uno tras otro. Ya que aún no hemos llegado al mundo de los pueblos libres. Sin embargo, la lucha nos ha dado la gran victoria: la supervivencia, el mantener el deseo de ser libres, conservar la esperanza.

El conflicto que mantiene Euskal Herria con España y Francia no comenzó con ETA. El nacimiento de ETA y la lucha de estos 51 años es el último reflejo de los levantamientos que ha llevado a cabo la ciudadanía vasca. ETA surgió en la negra noche del Franquismo, cuando Euskal Herria estaba sufriendo una dura estrategia de aniquilación. La cultura de resistencia política arraigada en la historia de Euskal Herria, la injusticia del ataque y el resquemor de los anteriores fracasos dieron fuerza a ETA.

El nacimiento de ETA dio paso a una nueva era en Euskal Herria: impulsó la conciencia de nación, impregnó de esperanza la desesperación que provocan la represión y la negación, inició la defensa de los pilares que nos convierten en nación y dio a conocer en el mundo la situación de Euskal Herria.

Desde entonces, ETA ha utilizado la lucha armada porque le han impedido cualquier otro camino. Tanto en el Franquismo como en la reforma política posterior. Entonces también se le dio la espalda a la voluntad de la ciudadanía vasca. Se partió en dos el territorio vasco dependiente de España. Nos impusieron por ley y por fuerza la Constitución Española que había sido rechazada en las urnas vascas.

La democracia española llegó aquí bajo la amenaza de las fuerzas armadas de España, que acallaron violentamente las protestas de la ciudadanía. Esa misma democracia que negaba a Euskal Herria la opción democrática de decidir su futuro.

Siendo negada de raíz su confesión política y sin recursos para encauzar el desarrollo político, económico, social y cultural del pueblo, querían llevar Euskal Herria a una muerte lenta.

Hay quien mordió el anzuelo. Cuando España acababa de salir del Franquismo, la influencia de la amenaza de las fuerzas armadas no era baladí. En esa situación, algunos creyeron que era mejor aceptar las escasas opciones que ofrecía el marco jurídico-político derivado de la Constitución Española. 30 años más tarde se ha comprobado que la mayoría de la ciudadanía vasca cree que fue una elección estéril.

Los gobernantes de España han comunicado a los cuatro vientos las ventajas de la democracia española. No les hacen falta ni intermediarios ni altavoces. La democracia española ha utilizado el terrorismo de estado, ha asesinado a docenas de ciudadanos vascos, ha torturado a cientos de personas y encarcelado a miles. Nuestro pueblo tiene más de 700 presos políticos. Pero estos datos no aparecen en los informes oficiales de las instituciones.

Jose María Sagardui, Gatza. No tiene el nombre del símbolo de la resistencia y de la dignidad, Mandela. Lleva 30 años preso. Como él, son muchos los que llevan más de dos décadas en la cárcel. Muchos quienes no tienen en casa a su hijo o hija, hermano o hermana, pareja, padre o madre.

En el siglo XXI no es fácil hacer entender la lucha armada. Muchas veces es más fácil entender la opresión de los pueblos.

Es más aceptable, si no es ruidosa. El ruido es lo que hace daño, más que la propia opresión de los pueblos. Así nos lo han enseñado los poderosos.

Es difícil entender la lucha armada en Europa. Pero, ¿no es aún más difícil de entender el que se niegue a la ciudadanía vasca el derecho a elegir su futuro de forma libre y democrática? ¿No es el darle la palabra al pueblo la manera más sensata y civilizada de darle una justa y duradera solución al conflicto?

Esa es la creencia y el deseo de ETA. Desde su nacimiento hasta hoy ha demostrado una y otra vez la voluntad de querer resolver el conflicto de forma democrática:

- En 1976, cuando la democracia de los españoles estaba al llegar, ya tenía hecha la oferta de la alternativa KAS.

- en 1989 se realizaron las conversaciones de Argel, hasta que las escasas perspectivas políticas del PSOE, partido político que entonces estaba en el poder, arruinaron todas las esperanzas.

- En 1995, ETA publicó una propuesta detallada que fue llamada Alternatiba Demokratikoa.

- En 1998, ETA demostró su clara voluntad al situar el conflicto armado dentro de los parámetros democráticos.

- En 2006, se realizó la última sesión de negociación y se lograron acuerdos, pero el hecho de que el Gobierno de España rompiera los acuerdos de forma continuada hizo estallar el proceso.

Los gobiernos de España suelen poner como excusa la lucha armada, que mientras exista lucha armada no puede haber ningún tipo de solución. Por el contrario, cada vez que ha surgido alguna ocasión, cada vez que se ha detenido la lucha armada, han malgastado la oportunidad. Al parecer, con la lucha armada no hay elección y sin lucha armada ya no hay necesidad.

Es el viejo cuento de poner la zancadilla desde la cerrazón al futuro de Euskal Herria.

Desde la Declaración de Bruselas hasta ahora

Han pasado seis meses desde que en marzo de 2010 se hizo pública la Declaración de Bruselas. Desde entonces se ha convertido en una referencia innegable en Euskal Herria, y más aún viendo que en la lista de los firmantes aparecen muchas personalidades experimentadas en resolver conflictos difíciles.

Como es sabido, en estos seis meses ETA no ha realizado ninguna acción armada. Para entonces ETA ya había dado la orden a sus grupos operativos de abandonar las acciones que ya tenían preparadas.

En este tiempo los estados de España y Francia han hecho oídos sordos y se han aferrado a la cerrazón, al camino de la represión. Incluso cuando ETA ha informado de su decisión. No les importa que todo el mundo subraye la importancia de la decisión. "Insuficiente" dicen. "¡Ya es suficiente!" gritamos nosotros, en cambio. ¡Que dejen a Euskal Herria decidir en paz su futuro!

Sin embargo, el discurso de que no es suficiente se está convirtiendo en "insuficiente". Al menos en cuanto a la estrategia de mantener desesperanzada a la ciudadanía. En estos meses la ilusión ha resucitado en Euskal Herria, hay ganas de enfrentarse al reto de estructurar un cambio político e intención de convertir en visible y eficaz el deseo de la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas.

Cuando se da la ocasión el Gobierno de España ve peligro. Es decir, el peligro de superar la imposición. Por lo tanto, en vez de aferrarse al reto democrático, el Gobierno de España ha tomado el camino contrario. Y su primera elección ha sido prohibir la movilización de la mayoría social a favor de los derechos civiles y políticos.

La postura y el compromiso de Euskadi Ta Askatasuna

El 5 de septiembre de 2010 ETA ha dado a conocer su decisión de no realizar acciones armadas. Frente a la cerrazón de Francia y España, ETA ha hecho a la mar una vez más el barco de la oportunidad para solucionar democráticamente el conflicto.

Y ha tomado la primera decisión sin echar el ancla, dispuesta a sumergirse en aguas más profundas.

Teniendo voluntad democrática, hoy y ahora, es posible solucionar el conflicto.

En la Declaración de Bruselas se le realizaba una petición concreta a nuestra organización y, asumiendo nuestra responsabilidad, queremos hacer llegar la respuesta correcta:

1.- El conflicto que tiene Euskal Herria con España y Francia se basa en profundas razones políticas. Por eso, para superar el conflicto, más allá de pasos parciales, es necesario desarrollar una propuesta que aúne las raíces del conflicto y desate los nudos.

2.- Si el conflicto se va a superar definitivamente, necesita una sólida solución, que se construya con compromisos de muchas partes y se desarrolle mediante conversaciones y negociaciones.

3.- Teniendo en cuenta el compromiso que habéis mostrado respecto a la solución del conflicto, ETA da a conocer su disposición para analizar juntos los pasos que necesita la solución democrática, incluidos los compromisos que deberá adoptar ETA.

En las dos últimas décadas no son pocos los nuevos estados que han surgido en el corazón de Europa y que han encontrado la aceptación internacional. También tenemos cerca los pueblos que están construyendo su independencia dando cauce a la voluntad de los ciudadanos de Groenlandia y Escocia.

Si hay voluntad política, sí que existe la posibilidad de construir el futuro de los pueblos de modo libre y democrático.

Sabiendo que la clave de la solución está en Euskal Herria, es muy importante la aportación que se pueda hacer desde la comunidad internacional.

Por eso, volvemos a llamar a las comunidades internacionales, agentes e instituciones para que participen en el impulso y la construcción de un proceso democrático que dé una solución duradera, justa y democrática a este conflicto político que se ha prolongado durante siglos.

¡Viva Euskal Herria libre! ¡Viva Euskal Herria socialista! ¡Sin descanso hasta conseguir la independencia y el socialismo!

En Euskal Herria, a 15 de septiembre de 2010

Euskadi Ta Askatasuna

E.T.A.