'Consellers' del PSC piden a Montilla un gesto de firmeza ante el PSOE

La primera reunión del Govern celebrada después de la multitudinaria manifestación del sábado sirvió para constatar que el tripartito es consciente de que los ciudadanos exigieron unidad y firmeza a los políticos en favor de los intereses de Catalunya. El debate fue prácticamente monográfico y, según varios asistentes, entre las intervenciones más contundentes destacaron las de losconsellerssocialistas identificados con el ala catalanista del PSC. El titular de Economia, Antoni Castells; la de Justícia, Montserrat Tura; la de Salut, Marina Geli; el de Educació, Ernest Maragall, y el de Política Territorial, Joaquim Nadal, reclamaron que el Govern sea partícipe del «clamor contra la reducción del horizonte de autogobierno que se había pactado». Se trata, según reconoció uno de estosconsellers, de compartir el sentimiento de «dignidad herida» que los ciudadanos les trasladaron el 10-J.

Los titulares de Economia y Educació fueron de los más contundentes y subrayaron que los socialistas catalanes deben «hacerse valer» en Madrid. Ambos ya se expresaron en términos similares en la reunión que la ejecutiva del partido realizó hace 15 días, cuando solo se conocía el fallo del Tribunal Constitucional. Entonces, tanto Castells como Maragall y Tura exigieron al PSC que no se pliegue a los intereses del PSOE.

ALMUERZO EN EL PALAU / Tras la reunión del Govern, Montilla convocó a los consejeros socialistas a almorzar en el Palau de la Generalitat para fijar la estrategia. En el PSC no existe unanimidad sobre cuál es el camino a seguir en Madrid. Hay dirigentes que, como Castells, son partidarios de presentar un texto que permita a sus 25 diputados situarse al lado del resto de los partidos catalanes aunque sea a costa de que el PSOE se abstenga o incluso que vote en contra. Otros, en cambio, consideran que solo debe presentarse un texto que pueda contar con el apoyo del PSOE. Es lo que el diputado del PSC y secretario adjunto del grupo socialista, Daniel Fernández, definió como una propuesta «ganadora».

Según fuentes del Ejecutivo catalán, elpresident cree que, por más esfuerzos que haga el PSC para intentar acordar una resolución unitaria que luego se traslade al Congreso, CiU ya tiene decidido que pondrá todos los obstáculos posibles para boicotear la unidad catalana.

El líder nacionalista, Artur Mas, advirtió ayer al resto de las fuerzas que la federación nacionalista quiere que el lema de la manifestación,Som una nació. Nosaltres decidim, se incluya en la resolución parlamentaria que se pretende consensuar en el pleno del próximo viernes. En declaraciones a Catalunya Ràdio, aseguró que espera que el tripartito presente una propuesta y que el texto esté «a la altura de las circunstancias».

El viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta, verbalizó el malestar del PSC con Mas y le reprochó que pretenda recuperar el mismo lema que hace solo una semana fue motivo de una «discusión esotérica» entre los partidos. Claro que no parece que el debate por la resolución parlamentaria vaya a ser menos esotérico, porque el tercero en discordia, ERC, también va a la suya. Los consejeros republicanos expresaron en la reunión de Govern sus condiciones. De entrada, pidieron que el Ejecutivo catalán no despliegue ninguna ley que incluya los recortes del TC y reiteraron que la unidad solo será posible si implica ir «un paso más allá» del actual modelo autonómico. En esta misma línea, el líder de Esquerra, Joan Puigcercós, subrayó que el debate en la próxima campaña no girará sobre la validez del tripartito, sino sobre si hay que seguir con el autonomismo o iniciar el camino a la independencia.

A pesar de este ambiente poco proclive al acuerdo, Montilla ha convocado para el jueves una cumbre de líderes (a excepción de PPC y Ciutadans). Como demostró ayer elconsellerde Interior, Joan Saura, Iniciativa es la que acudirá al encuentro con un espíritu más conciliador. Montilla pedirá a los dirigentes catalanes –y todos candidatos a las autonómicas– que cada uno lleve su propia propuesta y después intentarán acordar una resolución unitaria.